Ford ha desvelado por fin el Mustang lo que ocultaba bajo la lona de su estand del SEMA, la exposición de automóviles personalizados y accesorios que se celebra en Las Vegas. Y lo ha hecho sorprendiendo a todos con una versión completamente eléctrica llamada Mustang Lithium desarrollado en colaboración con Webasto. Este Mustang es capaz de ofrecer 671 kW (900 CV) de potencia y 1.355 Nm de par motor gracias a un sistema eléctrico que funciona a 800 voltios.
En los 100.000 m2 del SEMA se pueden encontrar los vehículos más espectaculares, con las personalizaciones más llamativas que se puedan imaginar, y también proyectos interesantes que pueden llegar hacerse realidad en un modelo de serie. Muchos fabricantes muestran prototipos que, en función de la respuesta del público pueden llegar a hacerse realidad.
Ford es uno de ellos, y lo que bajo la lona parecía ser un Ford Mustang híbrido enchufable que además no parecía un Mustang normal sino un Shelby con su correspondiente cobra en la parrilla frontal, se ha transformado en este Ford Lithium. En colaboración con Webasto, un histórico proveedor alemán de la industria automotriz que desde 2017 amplió su cartera de productos para incluir la movilidad eléctrica, ha hecho realidad un Mustang eléctrico con 671 kW (900 CV) de potencia que genera un par brutal de 1.355 Nm. Este impresionante tren motriz funciona a 800 V, como hace también el Porsche Taycan.
Poco más se sabe sobre sus especificaciones técnicas. No se conoce la capacidad energética de su batería que debería ser una de sus características fundamentales (además de la potencia) para aprovechar la velocidad de carga que permiten esos 800 Voltios de sus sistema eléctrico. Sin embargo, por ahora tan solo se sabe que utiliza el sistema de carga TurboDX de Webasto que, según la web del proveedor, es capaz de cargar a 16 A y 240 V, lo que se traduce en unos escasos 3,3 kW de potencia que serán útiles para la recarga vinculada.
Según Ford, el Mustang Lithium ofrece "un rendimiento ultrarrápido que solo los sistemas de propulsión totalmente eléctricos pueden brindar". Le acompaña "una impresionante aceleración de un cuarto de milla" cuya cifra Ford no ha anunciado oficialmente. El sistema de transmisión eléctrica se ve acompañado por otros componentes encaminados a reducir el peso como diferentes partes fabricadas en fibra de carbono. También monta componentes dirigidos a aumentar el rendimiento como la suspensión, el sistema de frenado, los componentes aerodinámicos adicionales o las llantas de 20 pulgadas con neumáticos Michelin Pilot Sport 4S.
Pero la novedad tecnológica más significativa de este Mustang eléctrico es la caja de cambios de seis velocidades que Ford ha incluido, muy poco habitual en los coches eléctricos y menos todavía con un número de relaciones tan elevado. También incluye diferentes configuraciones para cambiar el modo de conducción los modos Valet, Sport, Track y "Beast".
Por ahora, siguiendo "las reglas no escritas del SEMA", el Ford Mustang Lithium es un prototipo único conceptual que Ford va a utilizar como banco de pruebas para evolucionar las tecnologías de batería y gestión térmica que están desarrollando con Webasto y para medir el interés que sus más acérrimos seguidores pueden tener por una versión totalmente eléctrica como esta. De ahí la elección de una feria como esta, donde estar rodeado de las ideas "más locas", aumentará su receptividad.
Lo que sí parece confirmado es el Ford Mustang híbrido (casi seguro que no enchufable) que llegará al mercado en 2020, un primer paso hacia la electrificación del fabricante americano que culminará con un SUV eléctrico llamado Mach E "inspirado en el Mustang".
Los otros Mustang eléctricos
El clásico de los sesenta de Ford es uno de los coches que más proyectos de electrificación ha generado. La compañía británica Charge Automotive está preparando una versión eléctrica, del que fabricará 399 unidades, cuyas entregas estaban previstas para finales de 2019. Sus prestaciones, sin ser escasas, son más modestas que las anunciadas por Ford.
La empresa rusa Aviar ha anunciado su intención de lanzar un Ford Mustang eléctrico capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 2,2 segundos y alcanzará una velocidad máxima de 250 km/h. Sus dos motores eléctricos están situados en los ejes dotándolo de tracción total con una potencia conjunta de 626 kW (840 CV) y alimentados por una batería de 100 kWh de capacidad que alcanza una autonomía superior a los 500 kilómetros.
Charge Automotive, una startup británica, se ha encargado de fabricar un Mustang eléctrico envuelto en la carrocería de la primera generación de los años sesenta más potente incluso que el primer Shelby Mustang GT500. Dos motores eléctricos entregan una potencia de 476 CV y un par motor de 1.200 Nm. Dichos motores se alimentan de una batería de 64 kWh que ofrecen una autonomía de 321 kilómetros.