Lamborghini quiere cambiar su tendencia hacia una imagen más amistosa para con el medio ambiente a través de lanzar nuevos vehículos, o renovando los actuales que ya conocemos, obteniendo un importante protagonismo de la electrificación en sus mecánicas. Para ello, desde la directiva de la marca italiana, aspiran a lanzar coches específicos más orientados hacia el lujo y el confort, aunque sin abandonar en ningún momento su ADN primigenio, el cual se enfoca principalmente sobre las prestaciones más puras.
Esta información ha sido publicada por Top Gear después de una reciente entrevista con el CEO de Lamborghini, Stephan Winkelmann. Durante la charla, el directivo aseguró que la marca tendrá todos sus modelos bajo una importante presencia eléctrica para el año 2025. En los últimos meses, Lamborghini lanzó su última edición del Aventador "puro", con un enorme bloque de gasolina, V12 y aspiración natural, esta edición se conoció como Aventador Ultimae, del que lanzaron 600 unidades y las cuales se vendieron "en un abrir y cerrar de ojos". Esto ha supuesto un punto de inflexión ya que los clientes de la marca siguen apoyando las mecánicas clásicas por lo que ¿es un error para la compañía electrificar su gama? Según el CEO de la compañía, no.
Uno de los principales motivos de ello será el radical diseño que continuarán presentando estos modelos, muy en la línea histórica de la propia firma, ya que ellos entienden que para el propietario de un Lambo es tan importante lo que él piense del coche como lo que piensen los transeúntes de él. Es decir, hacer un Lamborghini poco atrevido no entra en los planes de la compañía. "Nuestros clientes siempre necesitan que les den el visto bueno cuando pasan con su coche. Así que lo peor sería si a ti te encanta pero nadie más lo hace", aseguró Winkelmann.
Para el año 2025, en los planes de la marca se encuentra contar con una gama compuesta por dos superdeportivos híbridos enchufables (sustitutos del Huracán y Aventador actuales), un sustituto del Urus en forma de modelo 100% eléctrico, así como un cuarto modelo aún por determinar que también se asentará sobre una arquitectura completamente eléctrica. Sobre este último y misterioso coche eléctrico todos los rumores, así como el propio CEO, apuntan a que se tratará de un GT de lujo.
Sobre los futuros modelos eléctricos, Winkelmann incide en el hecho de que deben diferenciarse en todos los aspectos del resto de competidores, es decir, que su futuro GT de lujo no suponga lo mismo que conducir un Porsche Taycan u otros modelos. Esta diferenciación incidiría, además de en el diseño exterior e interior, sobre la propia dinámica del coche, ya que la firma italiana del toro llevaría todas sus especificaciones hasta un punto mucho más extremo. Aceleración, paso por curva, dinámica, frenado y suspensión, serán algunos de los elementos de los que presumirán los futuros coches eléctricos de Lambo.
Sin embargo, hay otro punto en el que actualmente se encuentran trabajando y es el sonido del que gozarán estos vehículos. De primeras han descartado el uso del sonido falso, ya que este quieren que sea nuevo e innovador, nada de hacer que sus eléctricos suenen a V12, ya que esto no tendría sentido.
Sobre los dos modelos superdeportivos, Winkelmann habló de que estos no renunciarán a su concepción de vehículo radical y prestacional, pues sendas actualizaciones de los modelos que conocemos hoy en día deberán ir un paso más allá, con mayores especificaciones que se apoyen en la entrega de potencia inmediata u otros comportamientos aún por determinar. El CEO aseguró que, sobre estos modelos, su idea será la de alargar la vida útil de sus mecánicas térmicas y dotarlas de electrificación para así extender su rango vital, pues los clientes de la marca siguen queriendo este tipo de mecánicas.