El fabricante chino Nio ha comenzado la producción de su tercer SUV eléctrico, el EC6, que se une a su catálogo formado por el ES8 y el ES6. Se trata de un nuevo modelo tipo crossover, marcado por la pronunciada caída del techo en la parte trasera y por una configuración mecánica que le pone a pelear directamente con su rival más importante: el Model Y, que Tesla tiene previsto producir de forma local en su Gigafactoría de Shanghái, donde actualmente ya fabrica el Model 3.
El nuevo EC6 es un SUV eléctrico que sigue las líneas tipo cupé que otros fabricantes, sobre todos los alemanes, han seguido en sus últimos modelos. En su versión más potente, su tren motriz está formado por dos motores eléctricos. El primero, de imanes permanentes desarrolla 160 kW (215 CV) y el otro, de inducción, 240 kW (322 CV). La potencia conjunta total será de 406 kW (544 CV) y será capaz de acelerar de 0 a 100 m/h en 4,7segundos.
Estarán alimentados por una batería que podrá configurarse con tres capacidades diferentes: 70, 84 y 100 kWh, todas ellas acompañadas de un sistema de refrigeración líquida. En el caso de la última opción, la autonomía del EC6 alcanza los 615 kilómetros según el antiguo ciclo de homologación NEDC europeo. Nio no revelará los datos técnicos y los precios de cada una de las variantes hasta el próximo mes de julio. Las primeras entregas están previstas para septiembre en China. Su objetivo es convertirse en el competidor del Tesla Model Y, que el fabricante americano tiene previsto producir directamente en territorio chino en su fábrica de Shanghái.
Nio EC6.
Financiación del gobierno chino
William Li, fundador, presidente y CEO de NIO y An Jin, presidente de JAC, se encargaron de revelar el lanzamiento oficial de la producción del EC6. En un evento al que también asistieron altos funcionarios del gobierno provincial de Anhui, del gobierno municipal de Hefei y muchos funcionarios gubernamentales, también se anunció el acuerdo marco entre Nio y la ciudad de Henfei. Gracias a él se generarán más de 10.000 millones de yuanes (alrededor de 1.300 millones de euros) para Nio que le ayudarán a afrontar los costes de desarrollo y fabricación de este nuevo modelo. A cambio, la compañía se ha comprometido a construir fábricas y centros de investigación en la ciudad, que de esta manera invierte en el desarrollo industrial de la región.
Nio ha querido poner en marcha una fábrica para sus coches eléctricos primero en Shanghái y luego en Beijing, pero sus problemas financieros no le han permitido llevar a cabo sus planes. El año pasado, el cofundador Jack Cheng se retiró del equipo de alta dirección. Nio reportó pérdidas por valor de 370 millones de dólares (unos 332 millones de euros) en el tercer trimestre del año pasado.
Debido a sus problemas financieros, al igual que sus dos primeros modelos, el ES8 y el ES6, el EC6 se fabricará en Hefei, en el Centro de Fabricación Avanzada de la empresa conjunta creada entre Nio y el fabricante local de automóviles JAC.