El Tata Avinya EV es un concept eléctrico que anuncia la llegada de una nueva plataforma dedicada a esta tecnología desarrollada íntegramente por el fabricante indio. Su nombre deriva de una palabra sánscrita que significa 'innovación'. Se trata de un modelo que recupera la imagen de los monovolúmenes, casi ya olvidada, alejándose del formato SUV tan popular, pero con un perfil bajo y aerodinámico similar al de las berlinas. En su interior, cuando todos los fabricantes parecen querer imitar a Tesla y el interior minimalista del Model 3 con una pantalla central única, Tata va un poco más allá eliminándola por completo.
Como en la mayoría de las nuevas generaciones de coches eléctricos que los fabricantes están desarrollando, el Avinya mezcla varios formatos diferentes para crear un habitáculo en el que los ocupantes puedan disfrutar de los futuros viajes autónomos. El concept mantiene una línea de perfil baja, con un capó corto, como el de los monovolúmenes, para terminar en una zaga que baja casi en perpendicular para ayudar a la aerodinámica a hacer de él un coche muy eficiente. Las puertas de apertura opuesta dan paso a un interior que busca la sencillez.
Como ya se pudo ver en el Tata Sierra EV Concept, el fabricante ha simplificado todo lo posible el habitáculo. Las enormes pantallas del salpicadero que habitualmente sustituyen los tradicionales indicadores de la instrumentación, aquí no tienen cabida. Tata ha eliminado todo esto situando únicamente una pequeña pantalla en el interior de la rueda del volante y colocando una gran barra de sonido en el salpicadero.
El Tata Avinya anuncia una nueva apariencia para los modelos eléctricos de la marca, que lucirán una nueva firma lumínica delantera y trasera que reinventa la "T" de su logo tradicional formado por dos líneas blancas dobladas en ángulo recto y situadas dentro de un óvalo azul con la palabra TATA escrita debajo. Ahora las tiras led recuperan esa forma recorriendo las líneas del capó y la zaga.
El salto internacional de Tata
Más allá de este coche eléctrico conceptual, Tata quiere mostrar que considera la electrificación como una oportunidad para la marca. Actualmente genera la mayor parte de su facturación en la India y en los países vecinos. El fabricante ocupa actualmente el 90 % del mercado eléctrico en India. Un mercado todavía muy pequeño con poco más de 20.000 unidades compuesto principalmente por vehículos de flota o propiedad de organismos gubernamentales. Tata tiene la intención de continuar por este camino aumentando su capacidad de producción de coches eléctricos hasta las 80.000 unidades.
Posteriormente, hasta 2026, tiene previsto lanzar 10 modelos eléctricos a los que destinará una inversión de 2.000 millones de euros. Algunos de estos modelos serán adaptaciones de vehículos ya existentes y otros serán modelos exclusivos, como podría ser una versión de producción del Avinya que llegaría en 2025.
Pero Tata no permanecerá exclusivamente en el mercado Indio. Los expertos aseguran que la participación del país asiático en el mercado mundial de eléctricos alcanzará un 30 % en 2030. Por eso, los nuevos eléctricos desarrollados por Tata serán la punta de lanza de Tata a nivel internacional. De hecho, el propietario de Jaguar Land Rover tiene la intención de aprovechar la electrificación para expandirse fuera de su mercado nacional. Estos modelos deben darle una imagen más tecnológica y moderna que la actual.