Bajo el nombre CAKE Kalk AP, el fabricante sueco está poniendo en marcha un ambicioso plan para ofrecer una variante de este modelo de motocicleta eléctrica que integra un sistema de carga solar. El objetivo no es otro que apoyar a Southern African Wildlife College (SAWC) a atrapar a los cazadores furtivos de África. Su capacidad para manejarse en los complicados terrenos africanos sin necesidad de repostar, gracias a la carga solar, el mínimo mantenimiento que requiere, y su silencio, que no le delata frente a los cazadores, hacen de estas motocicletas una herramienta ideal para este trabajo.
La caza furtiva está devastando la población de animales en peligro de extinción en gran parte de África. Las peculiaridades del terreno en el que habitan hacen que las motos de cross se hayan convertido en una potente herramienta para los guardabosques, ya que les permite rastrear y detener a los cazadores furtivos. Si bien proporcionan un transporte rápido y resistente en estos complejos terrenos, también tienen dos desventajas importantes: el repostaje continuo de combustible que obliga a disponer de helicópteros que transportan tanques de gasolina y los depositan en zonas remotas, y el ruido, que previene a los cazadores de la presencia de los guardas y les regala un tiempo precioso para huir.
En este escenario, CAKE se ha asociado con SAWC para poner en marcha este proyecto. Con la ayuda de las soluciones de carga solar de la empresa Goal Zero, un reconocido fabricante de productos relacionados con la "energía desconectada", las baterías de las motocicletas eléctricas se pueden recargar sin necesidad de una red eléctrica para ser completamente autosuficientes. Además, el casi nulo mantenimiento que requieren estos vehículos incrementa el tiempo que pueden funcionar de manera autosuficiente.
Kit de carga solar de Goal Zero que acompaña a cada CAKE Kalk AP.
Durante los últimos meses, CAKE ha estado desarrollando sus nuevas motocicletas africanas especialmente diseñadas para este programa. Ahora la compañía ha presentado la versión definitiva preparada para las operaciones de caza furtiva que viajarán a África, llamada CAKE Kalk AP junto con la estación de carga solar que la acompaña. Como su propio nombre indica, están construidas a partir de la plataforma de la CAKE Kalk ya existente en el catálogo de la empresa que cuenta con dos versiones, la Kalk & y la Kalk INK &, que solo se diferencian entre ellas porque la segunda cuenta con los accesorios que la hacer legal para circular por carretera.
La ayuda de SAWC ha sido aquí fundamental para garantizar que las motocicletas pudieran satisfacer las necesidades de los guardabosques que patrullan estas áreas remotas que son el objetivo principal de los cazadores furtivos. Las pruebas de campo que forman parte de un plan de estudios y capacitación de esta organización africana comenzarán a finales de año con la versión definitiva de estas motocicletas eléctricas.
La CAKE Kalk AP cuenta con una batería de 2,6 kWh que es capaz de mantener en funcionamiento el motor eléctrico de 11 kW de potencia, situado en posición central, durante aproximadamente tres horas. Cada motocicleta cuenta con un panel solar y una estación de energía de Goal Zero. El par máximo que es capaz de desarrollar es de 42 Nm, que gracias a la transmisión se convierten en 280 Nm en la rueda. La transmisión es la misma que emplea el modelo del que parte, es decir, un piñón trasero de 80 dientes y una rueda dentada delantera de 12 dientes, unidos por una correa de carbono de Gates. La velocidad máxima que puede desarrollar es de 90 km/h.
Batería de 2,6 kWh de la CAKE Kalk AP.
Para que pueda atravesar cualquier tipo de terreno el motor está sellado para que pueda ser sumergido por completo y soportar las condiciones más duras de funcionamiento. La Kalk AP también cuenta con un software especialmente diseñado para hacer frente a las altas temperaturas que tendrá que soportar en África.
El SAWC comenzará las pruebas de campo con las nuevas motocicletas eléctricas CAKE Kalk AP a finales de este año como parte de su plan de estudios y capacitación. "Este es un ejemplo perfecto de un propósito que cumple con la sostenibilidad: salvar la vida de las especies en extinción, energía solar u nueva tecnología. Nos sentimos muy honrados de trabajar en esta iniciativa y contribuir a desarrollar los medios para ayudar a frenar la caza furtiva en la región" ha explicado el CEO de CAKE, Stefan Ytterborn.
Mediante el programa benéfico de CAKE, los particulares adquieren una motocicleta para uso propio y otra para la flota africana, incluido el kit de carga solar.
Además de proporcionar las motocicletas eléctricas para las operaciones contra la caza furtiva, CAKE también comercializará este modelo como una edición especial de tan solo 50 unidades, destinadas a un programa benéfico. Quien desee colaborar con esta iniciativa podrá adquirir uno de ellos a un precio de 25.000 euros y con ese dinero CAKE se encargará de suministrar una segunda motocicleta que se añadirá a la flota de la de SAWC para luchar contra la caza furtiva, junto con el equipo de carga solar.