Las motocicletas eléctricas tienden a ser extremadamente capaces e imperdonablemente caras, o, por el contrario, muy asequibles, si se trata de scooters de origen chino que prácticamente no se diferencian entre ellas. En este mercado, la startup española Ox Motorcycyles ha creado la Ox One, que vende por 5.200 euros y la Ox Patagonia, derivada de la primera, ambas fabricadas en Coslada, Madrid. La segunda tiene como objetivo encontrar un término medio entre la experiencia eléctrica y la aventura, por la que hay que pagar 6.900 euros y que ya se puede reservar.
La Ox Patagonia está construida sobre el primer modelo de la compañía española, la cafe racer Ox One, por lo que comparte la mayor parte de su plataforma, sus componentes y sus prestaciones. El motor eléctrico está situado en el buje de la rueda trasera y rinde hasta una potencia nominal de 6 kW (8 CV) que se traducen en 50 Nm de par (la potencia pico es de 11 kW (15 CV). El conjunto transmite sensaciones bastante tranquilas, pudiendo alcanzar velocidades de hasta 110 km/h.
El paquete de la batería que alimenta el conjunto es extraíble y se sitúa ocupando toda la parte central de la motocicleta. Pesa 22 kilogramos y promete una autonomía aproximada de 100 kilómetros, aunque no se indica que sea una cifra obtenida de un ciclo de homologación. En la información que se ofrece en la web tampoco queda clara la capacidad, puesto que se dice que funciona a 72 V y 60 A. Es posible que el amperaje que se indica sea una errata y se refiera en realidad a carga eléctrica, es decir 60 Ah, lo que se traduciría en una capacidad de batería de 4,32 kWh. El tiempo de recarga de la batería es de cinco horas en un enchufe doméstico, ya que no cuenta con ningún sistema de carga rápida.
También hereda el cuadro de la Ox One formado por un marco de doble cuna con un asiento que permite viajar al piloto y a un acompañante. Sobre el manillar incorpora una pantalla digital para la información sobre el estado del sistema eléctrico y la instrumentación. Sobre la batería hay una guantera con un cargador USB con espacio para el móvil.
La Ox Patagonia implementa también el sistema de inteligencia artificial ELISA, que mejora la seguridad y experiencia del conductor. Permite conectar la motocicleta con el móvil para reflejar la información personalizada del vehículo y del trayecto en tiempo real. Según Ox Motorcyles, la moto incluye sensores 360° capaces de avisar al conductor si un vehículo se acerca peligrosamente previniendo así los accidentes. El sistema también integra navegador y localizador GPS, estadísticas de consumo y conducción y asistencia técnica 24 horas.
Donde se aprecian mayores diferencias entre la Ox One y la Patagonia es en el peso. Mientras que la primera detenía la balanza en los 150 kg (331 lb), la segunda gana 10 kilogramos, debidos a los extras que incorpora para convertirse en una motocicleta eléctrica de aventuras. Es 50 mm más alta gracias a la suspensión de mayor recorrido y una llanta delantera con radios de 19 pulgadas. Incluye una pantalla protectora alrededor del faro LED delantero y algunas barras de protección a los lados de la batería. También incluye un conjunto de alforjas de cuero de 14 litros. El tramado dual de los radios de las llantas es también de diseño propio, lo que completa el aspecto aventurero.
La Ox Patagonia está ya disponible para la reserva a través de la web del fabricante. Su precio es de 6.900 euros, lo que probablemente es el mayor reclamo ante la que podría ser su competencia más destacada, la Zero FX, que ofrece mejores prestaciones en prácticamente todos los conceptos pero tiene un precio que es más del doble que el modelo español. Las entregas de Patagonia no comenzarán hasta el mes de septiembre, a la espera de que Ox Motorcycles comience a entregar las primeras unidades de la Ox One.