El catálogo de bicicletas eléctricas de Gazelle está formado básicamente por vehículos destinados a realizar recorridos urbanos para aquellos que necesitan un transporte diario eficiente. La Gazelle Ultimate T10 HMB también responde a este perfil desde lo más alto de la gama, ofreciendo la comodidad intrínseca de la marca. Una cualidad que hace que el ciclista desee seguir pedaleando durante mucho tiempo ayudado por la potencia, el alto rendimiento y la fiabilidad de un sistema eléctrico firmado por Bosch.
Royal Dutch Gazelle es un fabricante de bicicletas holandés fundado en 1892, por lo que atesora muchos más años de experiencia que otras marcas más conocidas en el mercado internacional. Mantenerse en él todos estos años y producir 250.000 bicicletas anuales solo tiene un secreto. Gazelle ha sido capaz de crearse una reputación que define sus bicicletas como vehículos deseables y capaces. Si bien en su oferta mantiene bicicletas convencionales, Gazelle también ha sabido entender un mercado que vira hacia la electrificación.
La Ultimate T10 HMB es un buen ejemplo de ello. Esta bicicleta eléctrica es lo único que se necesita para recorrer cada día una ciudad con toda la comodidad y la fiabilidad que ofrece la marca. Una de las cosas que definen los modelos de Gazelle y que enorgullece a la marca es su fama de ofrecer comodidad, y en eso la T10 no se queda atrás.
Todo empieza por el diseño de su cuadro de aluminio del que se elimina la barra horizontal superior facilitado subir y bajar de ella todas las veces que sea necesario (muchas habitualmente, en una ciudad). Para los que buscan unas sensaciones diferentes, más similares a las de una bicicleta de trekking más rígida, Gazelle también produce una versión con tubo superior que afecta ligeramente a la geometría y que le da, aparentemente, la sensación de mayor solidez.
Gazelle Ultimate T10 HMB con cuadro de aluminio sin barra horizontal.
La suspensión delantera está integrada en la horquilla y ofrece un recorrido de 40 mm, suficientes para absorber la mayoría de las irregularidades que ofrece el pavimento urbano. La forma del manillar, ligeramente curvada hacia dentro también ayuda a obtener una posición de conducción muy cómoda y que el ciclista quiera permanecer pedaleando todo el tiempo posible.
Para asistir al pedaleo durante esos largos tiempos, Gazelle confía en uno de los fabricantes de componentes eléctricos para bicicletas eléctricas más prestigioso. Por eso equipa un motor central Bosch Performance Line situado en el buje del pedallier, que es capaz de ofrecer un par de salida de 65 Nm y apoyar el pedaleo del ciclista hasta los 25 km/h en la versión europea (32 km/h en la estadounidense).
La alimentación eléctrica proviene también de una batería de Bosch, integrada en el cuadro y extraíble, la PowerTube 500, que como su propio nombre indica ofrece 500 Wh de capacidad. En función de la configuración del modo de asistencia, de los cuatro que ofrece, puede llegar a alcanzar los 130 kilómetros de autonomía en el modo ECO o 50 kilómetros en el modo Turbo. Como en todas las bicicletas eléctricas del mercado, estas cifras dependen de muchas circunstancias, entre otras del peso del ciclista, de su estado físico y de la orografía del terreno que se recorre.
La Gazelle Ultimate T10 HMB también puede configurarse con un cuadro de aluminio que incluye la barra horizontal.
En cuanto a los componentes, cuenta con frenos de disco con accionamiento hidráulico de cuatro pistones, cambio de 10 marchas Shimano Deore y neumáticos Schwalbe Energizer. Para aumentar todavía más su comodidad y su funcionalidad, la bicicleta cuenta con un portaequipajes trasero de serie, guardabarros completos y ganchos para situar en ellos accesorios como por ejemplo unas alforjas. Finalmente, cuenta con un sistema de iluminación led con un faro delantero y un piloto trasero y el enrutamiento de todos los cables por el interior del cuadro. El peso total de la bicicleta es de 23 kilogramos.
La bicicleta tiene un precio de 3.499 euros en su versión básica y puede adquirirse en dos colores, gris y negro. También es posible adquirir dos tipos de alforjas, una simple por 70 euros y una estanca por 100 euros.