Desde Santa Clara, en California, Vintage Electric acaba de lanzar una nueva bicicleta eléctrica bajo el nombre de Vintage Café, con un diseño retro, marca de la casa, y con unas características de alta gama que se corresponden con su precio: 3.900 euros. Sobre un cuadro retro al más puro estilo de las motocicletas cruise americanas, con inserciones de cuero y madera, Vintage ha montado una batería extraíble que simula un motor. El de verdad, con 750 W de potencia nominal, y alimentado por una batería de 500 Wh, permite alcanzar los 45 km/h y una autonomía que se mueve entre los 32 y los 97 kilómetros, en función de la configuración de la asistencia al pedaleo.
Vintage Electric desarrolla, fabrica y comercializa sus propias bicicletas eléctricas diseñadas con tecnologías de última generación siguiendo la estética de los vehículos antiguos. Su diseño destaca por un amplio marco típico de las motocicletas Cruise americanas. Sobre los insertos de madera, la marca ha grabado su logotipo con láser que le da un toque de elegancia extra. El sillín y las empuñaduras del manillar incluyen un recubrimiento de cuero. Detener esta bicicleta corre a cargo de los frenos de disco con accionamiento hidráulico suministrados por Promax. El sistema de iluminación está formado por una luz trasera incorporada en el cuadro y un faro delantero de inspiración vintage de 6V, independiente del sistema eléctrico de la bicicleta.
Sobre el eje pedalier, en el cruce de la barra vertical y la inclinada, se encuentra una batería extraíble, que puede transportarse como si fuera un maletín, insertada en una carcasa personalizada que simula un motor de una motocicleta. Alimenta el motor eléctrico real, situado en el buje de la rueda trasera que es capaz de desarrollar 750 W de potencia nominal y alcanzar una velocidad máxima de 45 km/h. Con bicicletas eléctricas en su catálogo capaces de alcanzar hasta los 3 kW de potencia es posible que este motor ofrezca una potencia pico muy superior a la nominal.
La capacidad de la batería es de 500 Wh, lo que le permite ofrecer una autonomía que se mueve entre los 32 y los 97 kilómetros, dependiendo de la asistencia al pedaleo que se seleccione y de la topografía que se atraviese. La Vintage Café no cuenta con un acelerador que le permita avanzar si pedalear.
Batería extraíble de 500 Wh tipo maletín de la nueva bicicleta eléctrica Vintage Cafe.
En su eje pedalier se ha montado un sensor de par real, que Vintage ha bautizado como transmisión Vintorque. Este tipo de dispositivo proporciona una experiencia de asistencia al pedaleo más suave en comparación con los sistemas de asistencia de pedal basados en un sensor de cadencia, que generalmente son más económicos.
No es la primera vez que hablamos de una bicicleta eléctrica de este fabricante californiano que tiene como máxima el diseño único, la construcción impecable y el elevado grado de atención al detalle. De hecho, el precio de la nueva Vintage Café, 3.900 euros, la sitúa en la parte baja de su catálogo. La Vintage Electric Roadster 2020, destinada a aquellos que buscan una bicicleta eléctrica con una estética al más puro estilo retro de las motos café racer, tiene un precio de 6.995 dólares en Estados Unidos. Otro modelo anunciado a finales del año pasado es la nueva Vintage Shelby Cobra, derivada de la anterior e inspirada en las creaciones del piloto y diseñador Carrol Shelby. Su precio es de 7.249 dólares.
Las bicicletas de Vintage Electric están disponibles en todo el mundo, a través de su red de distribuidores. En España el distribuidor es Bullit Cyclery (Calle Burriana Num 14, Valencia). La compra puede realzarse a través de su página web, donde se explica el proceso de envío en función de la dirección de entrega del destinatario. Por ahora, en su catálogo ofrece el modelo Café por 3.849 euros, el Rally por 4.849 euros y el Scrambler, por 6.499 euros.
Las bicicletas de Vintage Electric van dirigidas a aquellos que buscan un tipo de vehículo diferente de todos las demás. En España, la startup RayvoltBIkes, con sede en Barcelona, ofrece una línea de bicicletas eléctricas retro que también apuesta por la acusada personalidad del carácter vintage, la personalización y las altas prestaciones.