Prácticamente todo el mundo conoce DHL y sus camiones (o furgonetas) amarillas. Están prácticamente por todos lados realizando trabajos de reparto de paquetes, sin embargo, ahora han empezado a utilizar un vehículo muy peculiar: camiones alimentados de hidrógeno para los trabajos de mayor distancia, eso sí, con una tecnología muy poco convencional.
La filial DHL Express, perteneciente al grupo Deutsche Post DHL, va a ser la primera de la compañía alemana en probar camiones alimentados con hidrógeno para trabajos reales en transporte de larga distancia, cubriendo una ruta entre Breda (Países Bajos) y Bruselas (Bélgica). Apple, la conocidísima compañía de la manzana mordida, será el primer cliente en utilizar los servicios de logística con estos camiones de hidrógeno para repartir a tiendas y particulares sus iPhone, Mac, iPad, etcétera.
El proyecto forma parte del programa H2-Share de Interreg NW Europe, coordinado por WaterstofNet. El objetivo de dicho programa es promover el desarrollo de vehículos pesados con bajas emisiones de carbono con tecnologías basadas en el hidrógeno, para aplicaciones logísticas y adquirir experiencia práctica en diferentes regiones, además de crear un laboratorio viviente internacional que sirva como base para el desarrollo de la industria de vehículos de gran tonelaje 'cero emisiones'.
Sin embargo, no se trata de un camión totalmente nuevo diseñado desde cero, sino de una adaptación sobre un camión ya existente. Para ello se utiliza un extensor de autonomía fabricado por VDL: el extensor de autonomía (el objeto blanco situado entre la cabina y la caja del camión) está equipado con una pila de combustible que suministra electricidad a las baterías del camión. Gracias a este sistema, el camión puede cubrir distancias de unos 200 kilómetros sin emisiones. Como parte del proyecto, se ha desplegado una estación de servicio móvil de la compañía alemana Wystrach, donde el camión reposta diariamente.
Esta tecnología es poco habitual, prácticamente única en el mundo, pero no es la primera vez que se utiliza. VDL la presentó el año, aunque en un formato distinto: entonces proponía un extensor de autonomía en un remolque, el cual suministra electricidad al autobús eléctrico que lo precede.
Durante la fase de pruebas de este proyecto, sus promotores aseguran que se evitará la emisión de hasta 350 toneladas de CO2 a la atmósfera. El grupo Deutsche Post DHL está invirtiendo en electrificar su flota y en el uso de combustibles alternativos para reducir su huella de carbono, ya que consideran que cada tecnología se adapta mejor a un tipo de trabajo concreto. Mientras que los camiones eléctricos de batería pueden funcionar eficazmente en el reparto de última milla, dice DHL, los combustibles como el hidrógeno son esenciales para el transporte 'cero emisiones' de largo recorrido. Los resultados del proyecto ayudarán a evaluar el potencial del hidrógeno para esta aplicación y, en base a ello, tomar decisiones sobre la mejor manera de reducir el impacto medioambiental de las flotas de reparto.
