Las pruebas de desarrollo son la tónica habitual de la industria. Duros ensayos que tratan de simular años de vida con el fin de mejorar el producto final, así como de detectar posibles fallos antes de llegar a la fase de producción. En el pasado, muchos expertos han criticado duramente a Tesla precisamente por no probar debidamente sus vehículos antes de sacarlos al mercado. Ahora, esa tónica se ha roto con el Tesla Semi que es, sin duda, el vehículo más probado en la historia de la compañía.
Habitualmente, las pruebas de desarrollo se comprimen en un plazo aproximado de dos años, puede que incluso menos si se dispone de varias unidades de ensayo. Durante ese tiempo, los ingenieros se encargan de testear y analizar cada mínimo detalle de un coche o de un camión, como es el caso que nos ocupa.
Los camiones tienen una vida útil mucho más exigente que cualquier turismo. Largas distancias, condiciones de clima cambiante, obstáculos en la carretera y cargas pesadas son el pan el cada día para ellos. La inversión en un camión es importante y los clientes necesitan que sean fiables y resistentes. Las pruebas a las que se someten durante su desarrollo son muy similares a las de un turismo, aunque con un nivel de exigencia muy superior. Ensayos en espacios controlados o en espacios abiertos simulando un día normal de trabajo.
El Tesla Semi se ha dejado ver varias veces durante su etapa de pruebas, habitualmente mientras recargaba en las instalaciones de Nevada. Lo que no habíamos visto hasta ahora son los test diseñados por los ingenieros para probar la resistencia del camión eléctrico ante diferentes adversidades. A través de un anuncio en Linkedin, Tesla ha publicado un vídeo donde podemos ver algunas de ellos, como, por ejemplo, cruzar grandes balsas de agua, atropellar objetos, conducción en climas extremos o viajes de largas distancias por terrenos complicados.
El resultado final ya lo conocimos de manera oficial a principios de este mes. Durante un acto bastante más discreto de lo habitual, el propietario de la compañía, Elon Musk, entregó las dos primeras unidades del Tesla Semi. Estas no han completado su etapa de desarrollo, pues Pepsico, el primer cliente en recibir el camión eléctrico, todavía tiene que cumplir con parte de la agenda de ensayos, esta vez en condiciones de uso real y normal. Mientras tanto, la factoría de Nevada continúa la producción a baja escala del Semi.
Los primeros datos oficiales demuestran que el Tesla Semi está llamado a revolucionar el mundo de la logística y el transporte por carretera. Con una enorme batería de 900 kWh de capacidad, es todo un alarde de resistencia y autonomía. Durante la presentación, demostró que es capaz de recorrer una distancia de más de 800 kilómetros a carga completa sin tener que recargar. A día de hoy, no hay rival capaz de igualar las cifras del Semi. Ahora sólo queda ver si cumple en el apartado de fiabilidad y durabilidad.
