La presentación y las entregas de las primeras unidades del Tesla Semi han causado un pequeño gran revuelo en la industria del transporte por carretera, que por ahora ve con escepticismo lo que es capaz de hacer este nuevo camión eléctrico. La ceremonia de entrega del viernes pasado y el vídeo que acompañó al evento en el que se veía al Semi recorrer 800 kilómetros con una sola carga no estuvieron acompañados por datos que permitan a los gestores de flotas hacerse una idea de su competitividad frente al diésel. Elon Musk ha salido al quite confirmando la eficiencia del Semi.
Ante las dudas que ha creado la presentación del Semi en cuanto a sus características técnicas y a las prestaciones que podría ofrecer, Elon Musk ha dado un paso adelante confirmando la eficiencia de su camión eléctrico. El consumo medio que declara el CEO de Tesla es de 1,7 kWh/milla (105,6 kWh/100 km), lo que se correspondería aproximadamente con una baterías de 900 kWh de capacidad. Se trata de una información importante, pero no es suficiente para saber si realmente el Semi es un producto tan disruptivo para la industria del transporte.
Esta información queda sesgada si no se conocen tres datos fundamentales más: su capacidad de transporte, es decir el peso que puede transportar manteniendo esa eficiencia, la potencia y curva de recarga y su precio de adquisición, ya sea mediante compra, mediante alquiler o mediante otro sistema que pueda "inventar" Tesla.
Más allá de un diseño rompedor, la tecnología que incorpora y la sostenibilidad ambiental, la industria del transporte se rige por cifras económicas. El coste por kilómetro, o el coste de propiedad del vehículo es la realidad de un negocio que necesita que el Tesla Semi sea capaz de transportar la misma carga que ahora lleva un camión diésel por menos dinero.
Conociendo la eficiencia del Semi (105,6 kWh/100 km o 1,7 kWh/100 km), los operadores ya pueden comenzar a hacerse una idea de lo que les puede suponer utilizar este camión eléctrico en su flota. Incorporando a la operación el coste que les supone la electricidad podrán calcular del ahorro que supone en cuanto a costes de combustible. Este dato también da una idea de la capacidad de batería del Semi que será de aproximadamente 850-900 kWh, los necesarios para recorrer 804 kilómetros (500 millas) a ese ritmo de consumo con una sola carga.
Lo que es necesario saber ahora es cuanta carga es capaz de transportar para cumplir con ese objetivo. Un camión de este tipo completamente cargado puede pesar alrededor de 32 toneladas. Por lo tanto, el peso del camión es un dato imprescindible para saber cuánto hay que restarla al peso del remolque para que pueda circular por vías públicas. Tesla afirma que el Semi tendrá aproximadamente la misma capacidad de carga que un camión diésel, pero estos se mueven en un amplio rango de pesos.
Otro dato que se desconoce es el tiempo que necesitará permanecer detenido el camión para recuperar toda la capacidad de la batería para reanudar la marcha. Los tiempos de inactividad también son clave en la industria del transporte. Con los cargadores de 1 MW que se han venido anunciando, y con una curva de carga capaz de mantener esta potencia durante la mayoría del tiempo que permanezca conectado, esta operación no debería tardar más de una hora, lo que es perfectamente asumible para un transportista.
Y todavía queda otro dato por conocer que también es básico en esta compleja ecuación: el precio del camión. En 2017, Tesla dijo que, según el modelo, podrían adquirirse por 150.000, 180.000 y 200.000 dólares, según el modelo, aunque estas cantidades pueden haber sufrido innumerables cambios en los últimos tiempos. Si fuesen ciertos, el Semi sería un camión revolucionario ya que podría amortizarse en aproximadamente tres años solo con el ahorro de combustible.