Estaremos de acuerdo en que la aceleración de los coches eléctricos ciertamente potentes es, cuando menos, bestial e incluso adictiva. Incluso en los modelos más comedidos, la respuesta es inmediata. Si hablamos del Tesla Model 3 Performance, la versión más rápida de este modelo, tenemos que hacer mención de su fulgurante 0-100 km/h en sólo 3,3 segundos. Es sabido que el nivel de carga de la batería afecta al rendimiento, ¿pero cómo influye el paso de los kilómetros en las unidades más antiguas?
Por regla general, los coches eléctricos pierden prestaciones en términos de aceleración conforme baja el nivel de carga de la batería. No obstante, hay excepciones y algunos fabricantes como Porsche han puesto especial cuidado en que el Taycan eléctrico no pierda prestaciones tras muchas carreras consecutivas. Pero como decíamos, es una honrosa excepción a la norma. Ahora bien, con el mismo nivel de carga, ¿cómo afecta la antigüedad de la batería y los kilómetros que lleva a la espalda?
El canal de YouTube 'Out of Spec Reviews' ha querido salir de la duda comparando dos unidades del Tesla Model 3 Performance, una del año 2020 con 48.000 kilómetros (el coche blanco) y otra de 2019 con algo más de 160.000 kilómetros en su haber (el gris).
Antes de continuar, conviene recalcar que no estamos ante la prueba con el mayor criterio científico que vamos a encontrar. Cada coche tiene neumáticos de marcas diferentes (aunque ambos con un enfoque prestacional) y el Tesla Model 3 Performance blanco, el más nuevo, lleva una suspensión algo rebajada que le debería proporcionar una tracción ligeramente mejor (levanta menos el morro al acelerar). Las llantas, aunque tienen diferente diseño, son del mismo tamaño y los neumáticos de las mismas medidas.
Otros detalles a tener en cuenta es que, según comentan, el Model 3 blanco ha tenido muchas recargas rápidas en Supercargador y ha visitado frecuentemente los circuitos. El Model 3 gris también ha tenido muchas cargas rápidas y su batería tiene una degradación aproximada del 10%. Para las carreras en cuestión, ambos tienen la batería en un estado de carga similar, en torno al 73%.
En la primera carrera, saliendo desde parado, gana el Model 3 Performance blanco, el más nuevo. En un segundo intento, esta vez saliendo desde 48 km/h (30 mph) gana el coche gris, el más antiguo. La diferencia es mínima en cualquier caso, y puede que se deba a la diferencia en el tiempo de reacción al indicar la salida con el claxon (donde el conductor que la da tiene ventaja).
En una segunda ronda de carreras, el Model 3 Performance blanco, el más nuevo, aumenta las diferencias respecto a la unidad con más kilómetros. Quizá la batería más antigua no sea capaz de mantener los picos de potencia de manera tan consistente como la nueva, o quizá los sucesivos intentos han menguado más su estado de carga y, por ende, su nivel de prestaciones. Aun así, las diferencias son muy pequeñas.
En cualquier caso, insistimos, la prueba no es científica porque la metodología no lo es y los coches también son ligeramente diferentes. No obstante, sí se puede sacar una conclusión: el Model 3 Performance con más kilómetros puede acelerar prácticamente igual que uno nuevo, y de manera muy consistente. Una buena noticia tanto si eres propietario de uno como si estás buscando uno de segunda mano.