Resulta curioso cómo cambian las modas y las tendencia de los compradores. La llegada del coche eléctrico ha abierto la puerta a la tecnología en la industria del automóvil. Hoy, las pantallas son parte fundamental para hacer una demostración de fuerza. El tamaño sí que importa, cuanto más grandes, mejor. No hay un coche nuevo que se precie que no las monte, pero en China la obsesión parece haber alcanzado un nuevo nivel. El Aito M9, un coche desarrollado conjuntamente por Huawei y Seres, acaba de ser presentado con más pantallas que asientos. Un dispositivo electrónico sobre cuatro ruedas.
Lo normal es que haya dos, como máximo tres paneles digitales en el interior de un coche moderno. Instrumentación digital, sistema multimedia y otros paneles que pueden centrarse en la climatización, en el info-entretenimiento trasero o como compañero de viaje de nuestro copiloto. Las opciones son múltiples y todas las marcas buscan la presentación más espectacular y llamativa posible. Mercedes fue pionera en este campo con la presentación del sistema HyperScreen. Un salpicadero completamente digital que fue estrenado con el lanzamiento del Mercedes EQS y que posteriormente ha replicado en otras unidades eléctricas.
Seis asientos, siete pantallas y un enorme panel que se despliega del techo
Si bien la presentación es impresionante, nadie lo puede negar, sí que es posible dudar de su funcionalidad o seguridad. Diversos estudios han demostrado que las pantallas distraen al conductor, pudiendo causar accidentes si no se es responsable con su manejo. Diferentes asociaciones quieren promover leyes que limiten el uso de dichos paneles mientras se circula con el fin de permitir al conductor centrarse en la carretera. Todos estos consejos de seguridad parecen haberse desoído ahora con el modelo propuesto por Aito, una empresa conjunta entre Seres y Huawei: el M9. Un SUV eléctrico capaz de contar con más pantallas que asientos.
Aito ofrece varias combinaciones posibles para su nuevo SUV de 5,23 metros. Hay opción de cinco o siete plazas. La presentación delantera siempre es la misma, tres paneles consecutivos con un tamaño in crescendo: 12,3 pulgadas para la instrumentación, 15,6 para el sistema de info-entretenimiento general y 16 pulgadas para el panel del copiloto. Ya de por sí estamos hablando de mucho panel, pero ahí no acaba la cosa. En la parte trasera, en la segunda fila de asientos se puede instalar una gran pantalla de 75 pulgadas, muy similar al formato que BMW ofrece en el i7. Se despliega desde el techo y permite a los ocupantes entretenerse durante el viaje.
Esto haría un total de cuatro pantallas y cinco pasajeros, pero hay más. Otra configuración posible es optar por una disposición de seis asientos 2+2+2. En ese caso, el Aito M9 será capaz de ofrecer siete pantallas diferentes. Tres en la parte delantera y una por cada plaza individual de la segunda y tercera fila. Podemos, incluso, sumar una octava, el Head-Up Display: un gran proyector que muestra en el parabrisas la información más importante con relación a la conducción. Para ofrecer todo este despliegue de sistemas, Huawei ha aportado el sistema operativo HarmonyOS 4 con un chip de última generación y hasta 25 altavoces.
Como vehículo, el M9 también puede decir que disfruta de varias configuraciones posibles. La unidad 100% eléctrica cuenta con dos motores de 523 caballos de potencia combinada alimentados por una batería CATL de 97,7 kWh de capacidad. Su autonomía homologada es de 630 kilómetros (ciclo CLTC). La unidad PHEV, o eléctrico con extensor de rango, suma un motor turboalimentado de 1.5 litros que le permite ampliar su autonomía hasta los 1.402 kilómetros. La última pregunta que te estarás haciendo, ¿cuánto pide Aito por el M9? El libro de pedidos ya se ha abierto con tarifas entre los 469.800 y los 569.800 yuanes, que al cambio vienen a ser entre 61.200 y 74.300 euros. Nada mal, la verdad.