La marca del biscione tiene un nuevo integrante en su familia. Se llama Alfa Romeo Junior (originalmente era Milano) y su nombre se tuvo que cambiar porque, aunque hacía un homenaje a la ciudad donde se fundó el fabricante italiano en 1910, el gobierno italiano lo consideraba ilegal. Un SUV pequeño que entra de lleno en uno de los segmentos más disputados del mercado y lo hace con versiones eléctricas e híbridas, además de un diseño bastante arriesgado.
El Junior es un B-SUV que mide 4,17 metros de largo por 1,78 de ancho y 1,50 de alto. Se trata, pues, del primo italiano del Jeep Avenger, y se posiciona ligeramente por debajo del Peugeot E-2008 y sus 4,30 metros de longitud.
Como no podía ser de otra manera en un Alfa Romeo, el diseño es uno de los pilares fundamentales del coche. El exterior destaca por sus líneas sinuosas, con una vista lateral de superficies limpias, cintura alta y hombros aún más altos. Los tiradores van camuflados en el pilar C, pero sí, hay puertas también detrás.
La trasera de tipo codatronca hace gala de un recurso estilístico icónico del Giulia TZ y que ha sido recurrente a lo largo de la historia de la marca. En este caso, además, es importante para mejorar la aerodinámica. Todas las luces traseras, tanto pilotos como intermitentes, quedan agrupadas bajo una carcasa ahumada que recorre todo el ancho del vehículo.
Pero si hay algo realmente destacable es el frontal, con una amalgama de elementos que da como resultado un morro recargado donde llama la atención la calandra con el Scudetto de la marca y los enormes faros en forma de C. Aunque tiene una insignia convencional sobre el capó, la calandra sobre el capó de las versiones Leggenda y Progresso tiene una reinterpretación del escudo de la marca, con el biscione y la bandera de Milán.
En las versiones convencionales, en esta calandra simplemente pone Alfa Romeo.
Detalles con buen gusto en el interior
En el interior encontramos un puesto de conducción enfocado al conductor, con un volante de diseño deportivo y un salpicadero ligeramente orientado hacia la posición del conductor. El cuadro de instrumentos es completamente digital (con una pantalla de 10,25 pulgadas), pero mantiene la emblemática disposición de doble círculo de la marca.
El sistema de infoentretenimiento tiene pantalla táctil de 10,25 pulgadas e incorpora widgets y, según Alfa Romeo, es más intuitivo que los utilizados hasta ahora. Incorpora un navegador con planificador de rutas para coches eléctricos y viene con ChatGPT integrado.
Hay dos detalles que hablan de la atención por los detalles de la marca italiana: las salidas en forma de quadrifoglio (trébol de cuatro hojas), símbolo por excelencia de los Alfa Romeo más deportivos; y los asientos deportivos Sabelt tipo semibaquet.
Todavía no hemos podido subirnos al Junior, pero la marca presume de espacio a bordo: su maletero tiene 400 litros de capacidad, colocándose en lo más alto de su categoría.
Junior Elettrica Veloce, un eléctrico pequeño pero matón
El Junior es el primer Alfa Romeo eléctrico de la historia, aunque tendrá también versiones microhíbridas y para diferenciarlos tendrán un apellido. La versión eléctrica se llama Junior Elettrica y estará disponible con dos niveles de potencia, ambas con la misma batería de 54 kWh de capacidad.
La versión de acceso tiene 156 CV de potencia, una motorización ya conocida en otros modelos del grupo Stellantis, que en este caso homologa 410 kilómetros de autonomía según el ciclo WLTP.
Por encima estará la versión Veloce, con 240 CV de potencia. Además de ser más potente, esta versión se distingue por equipar de serie diferencial mecánico autoblocante, tener una relación de dirección más directa, vías más anchas con barras estabilizadoras delanteras y traseras específicas, llantas de 20 pulgadas y suspensión y frenos deportivos (¡con discos de 380 mm!).
Alfa Romeo ha querido imprimir a este nuevo modelo su ADN deportivo, hasta el punto de que el equipo que coordinó el desarrollo de la dinámica de conducción es el mismo que desarrolló el Giulia GTA. El objetivo: tener el mejor comportamiento dinámico de su cateogría. Para conseguirlo tiene una dirección directísima (relación de 14,6) y la mayor rigidez estructural de su categoría; en la versión Veloce la suspensión deportiva se ha rebajado 25 mm; las barras estabilizadoras delanteras y traseras son más deportivas para garantizar un paso rápido en las curvas y se ha equipado un sistema de frenos con discos delanteros de 380 mm y pinzas monobloque de cuatro pistones, una auténtica salvajada sin precedentes en un B-SUV. Para ponerlo en contexto, los discos de freno son mayores que los del Stelvio Quadrifoglio de 519 CV.
Tres niveles de equipamiento más otro especial
Ya están abiertos los pedidos de Junior Speciale, la versión tope de gama que estará limitada exclusivamente a la edición de lanzamiento.
Más adelante, la gama normal estará compuesta por tres niveles de equipamiento: Tecno, Premium y Sport. Todavía no se han anunciado los precios para el mercado español.
