En poco tiempo Tesla ha abierto las plantas de Austin y Berlín. Con una diferencia de apenas un mes, ambas Gigafactorías han entrado en funcionamiento con la intención de llevar a la compañía a un nuevo nivel. El plan maestro de Elon Musk pasa por escalar la compañía, hacerla más grande, y para eso necesita fabricar más coches. La ampliación de la Gigafactoría de Berlín supondrá la paralización de las operaciones durante dos semanas, aunque el retraso merecerá la pena.
En las últimas semanas han corrido rumores sobre la posible ampliación de la factoría de Brandemburgo. Inaugurada en el pasado mes de marzo, la instalación está ganando experiencia y volumen de trabajo cada día que pasa. Hace unas semanas celebraban el hito de 1.000 vehículos fabricados en una semana, lo que ha animado a la compañía ha actualizar las instalaciones para mejorar esa cifra considerablemente y, de paso, introducir un nuevo turno de trabajo para extender su volumen de negocio.
Esta no será la única plaza que Tesla actualice próximamente, pues también hay planes para realizar trabajos semejantes en la Gigafactoría de Shanghái. El centro chino es el caballo de tiro de Tesla, con una producción muy superior a la de cualquier otra de las plantas. Gracias a la nueva ampliación se espera que la fábrica china tenga capacidad para fabricar un millón de coches por año, unos 21.000 vehículos por semana. Por supuesto hablamos de una escala completamente diferente a la planta alemana.
A pesar de sus cifras más modestas, la Gigafactoría de Brandemburgo está cosechando buenas cifras gracias a un excelente ritmo con las celdas 2170. En la Gigafactoría de Austin los problemas se acumulan por culpa de las celdas 4680 y el bajo ritmo de producción que tienen. Ante esa situación se ha tomado la decisión de reemprender la fabricación de Tesla Model Y con el paquete de baterías antiguo a la espera de poder suministrar las nuevas pilas a un mayor ritmo.
Pero centrándonos una vez más en las instalaciones alemanas, medios locales especializados han informado que la actividad se detendrá durante al menos dos semanas a partir del próximo lunes día 11. 14 días en los que la fábrica estará trabajando en su ampliación y en la contratación de nuevo personal para ese turno extra que se espera introducir, ampliándose así la plantilla actual contabilizada en más de 4.500 trabajadores. Hace unas semanas IG Metall informaba que a Tesla le costaba encontrar personal para su fábrica europea por culpa de unos salarios muy bajos.
Ni que decir tiene que este parón tendrá repercusión en las fechas de entrega del Tesla Model Y europeo, aunque se espera que una vez retomada la actividad se pueda recuperar el volumen perdido gracias al turno extra, de dos pasarán a ser tres, y a la mejora de capacidad de las líneas de montaje. Mientras tanto, de forma paralela, algunos rivales como Volkswagen consideran que esta estrategia de ampliación de fábricas puede afectar a la competitividad de la compañía. Solo el tiempo dictará veredicto.