El CEO de Stellantis, Carlos Tavares, podría anunciar pronto que el Fiat 500e totalmente eléctrico tendrá una versión con motor de gasolina e hibridación suave. Una información que recoge Autonews citando como fuente a varios proveedores que han confirmado los planes de la compañía italiana.
Puede sonar extraño, incluso surrealista, este cambio de rumbo en la estrategia comercial del Fiat 500. Un movimiento a la inversa de lo que venía siendo habitual. La transición lógica es que los coches térmicos que se conviertan en eléctricos, pero Fiat quiere hacer lo contrario y convertir el 500 eléctrico, que se diseñó expresamente para ser eléctrico, en un coche híbrido. El 500e está construido sobre una plataforma diseñada exclusivamente para vehículos eléctricos, totalmente diferente al anterior 500, que ahora tendrá que adaptarse para incluir una variante híbrida.
Proveedores de Stellantis en Italia han recibido solicitudes para aumentar la producción del Fiat 500 con dos sistemas de propulsión diferentes, con el objetivo de alcanzar 200.000 unidades al año. La fábrica de Stellantis en Mirafiori (Italia), donde se fabrica el actual Fiat 500, necesita incrementar su ocupación para ser rentable, pero la versión eléctrica no puede hacerlo sola. Sencillamente el Fiat 500 eléctrico no se vende lo suficiente y eso es un problema para Stellantis.
En marzo, Stellantis pidió incrementar la producción del 500e en Mirafiori a 175.000 unidades anuales, más del doble de las 77.260 que fabricó en todo 2023. Una cifra poco realista, en vista de las ventas del modelo (como veremos a continuación). El nuevo objetivo de 200.000 unidades incluye la adición de 125.000 unidades con motor de gasolina, según los proveedores citados como fuente, una motorización microhíbrida.
El Fiat 500e no se vende al ritmo esperado
El 500e, lanzado en 2020 como el nuevo 500, tuvo un comienzo prometedor, con una producción de 77.500 unidades en 2022. Fiat esperaba alcanzar las 90.000 unidades el año pasado, pero la demanda disminuyó en la segunda mitad del año, manteniéndose prácticamente plana, en 77.260 unidades.
Entre enero y abril de este año, Fiat lleva vendidas 12.288 unidades del 500e sumando la Unión Europea, Reino Unido y los países de la Asociación Europea de Libre Comercio. En el mismo periodo del año pasado, se vendieron 17.363 unidades del modelo, lo que supone una caída del 29% interanual. Las ventas del 500 con motor de combustión, que ha dejado de fabricarse, cayeron de 40.750 a 32.504 unidades.
El año pasado, Fiat vendió más de 104.000 unidades del 500 de gasolina y más de 62.000 del 500 eléctrico en Europa, según Dataforce. La desaparición del modelo de gasolina deja un hueco en el mercado, pero también tiene consecuencias en el balance de Fiat/Stellantis, pues se trataba de un modelo rentable y más que amortizado con el que ganaban mucho dinero.
El horizonte no pinta mucho mejor con el nuevo Renault 5
Los sindicatos italianos temen que la demanda menguante del 500e en Europa podría llevar a Fiat a reducir la producción en Mirafiori a 40.000 o 50.000 unidades anuales, a pesar de que el modelo también se exportará a los Estados Unidos. De hecho, la compañía italiana redujo uno de los dos turnos en Mirafiori a mediados de febrero y realizó despidos temporales en marzo, abril y mayo.
Añadir una versión de gasolina del 500e en Mirafiori podría calmar los temores sindicales sobre la disminución de la producción del 500e, así como ayudar a cumplir el objetivo del gobierno italiano de mantener la producción de automóviles en el país en no menos de 1 millón por año. No obstante, todavía no se ha tomado una decisión final al respecto. Tampoco está claro qué motorización empleará ni su fecha de lanzamiento al mercado, aunque podría llegar a lo largo de 2025.
A todo esto se añade un problema: la llegada del nuevo Renault 5 eléctrico, un rival claro del Fiat 500e por planteamiento y posicionamiento. El modelo francés, con una apuesta muy clara por el diseño, la tecnología y lo chic, es notablemente más asequible que el italiano. El 500e parte desde 29.000 euros, mientras que el Renault 5 hará lo propio desde 24.900 euros teniendo mayor autonomía y una potencia similar. Un problema que va ligado a otro: Fiat tiene poco margen para bajar el precio del 500, por lo que el modelo italiano tiene una situación complicada para remontar sus ventas.