Toyota, conocida como la marca más famosa del sector de los coches híbridos, ha decidido virar en favor de los coches eléctricos. Después de varios años de supuesto ‘retraso’ en su introducción masiva en este mercado, ahora la compañía ya sabe cómo va a hacerlo. Su intención es lograr importantes ahorros de costes, así como no verse sepultada por una sobreinversión en el sector sin tener la demanda adecuada por parte del cliente.
Por ello, su propio CEO, Koji Sato, ha confirmado que la marca espera crear una capacidad productiva de 3,5 millones de vehículos eléctricos para el año 2030, aunque sin que esto implique una nueva inversión masiva que ponga en riesgo su economía. Por ello, han presentado de manera oficial su proyecto bajo el nombre de ‘Área 35’.
Toyota quiere fabricar millones de coches eléctricos
Después de años de presiones a Toyota pidiendo el lanzamiento de nuevos coches eléctricos (actualmente solo tienen el bZ4X en su catálogo), tal y como afirman desde el medio Automotive News, la compañía ha decidido ahora optimizar su oferta de productos y centrarse en los que más nivel de demanda suscitan. Con ello, esperan ampliar la producción mundial del fabricante en un 35 por ciento.
El proyecto ‘Área 35’ incluye reducir el número de piezas utilizadas en sus vehículos hasta en un 80 por ciento, con el fin de simplificar dicha producción y abaratar los costes de sus coches. Esto, a su vez, permitirá acelerar el desarrollo de productos y acelerar la producción de estos, lo que repercutirá en un mayor número de modelos fabricados en el mismo lapso de tiempo. Con todo ello, a su vez, también podrán entregar más unidades y más rápidamente a sus clientes finales. Con ello, la marca debería aumentar sus beneficios netos en un 3,5 por ciento para el año 2030.
“Estamos trabajando para optimizar el número de tipos de especificaciones y piezas. También estamos ampliando el espacio para la producción de vehículos terminados y aumentando la eficiencia del desarrollo. Esto nos permite adaptarnos más eficazmente a los cambios en la demanda real y tomar decisiones de inversión de último momento. Nos estamos preparando para construir un sistema inteligente que pueda responder de manera flexible a las necesidades de nuestros clientes”, confirmó Yoichi Miyazaki, director financiero de Toyota.
Al mismo tiempo, Toyota espera vender hasta 3,5 millones de coches eléctricos para 2030. De todos estos, 1,7 millones se asentarán en la nueva plataforma modular Stromer con la que la compañía japonesa debutará en 2026 de la mano de Lexus. Con todo este plan, Toyota espera reducir los plazos de producción a la mitad y los costes de equipamiento bajen en un 25 por ciento.
Dentro del proyecto ‘Área 35’, Toyota espera utilizar nuevas técnicas de producción de coches eléctricos, así como una más alta automatización en la fabricación de piezas. Los nuevos modelos eléctricos deberían entrar en producción en las mismas plantas que lo hacen los híbridos actuales.
“El Área 35 es una iniciativa destinada a liberar espacio reduciendo el número de piezas utilizadas en las instalaciones existentes en lugar de ampliar el área de producción mediante la construcción de nuevas instalaciones”, afirmó el responsable de la marca. Por otro lado, Toyota no descarta tener que construir nuevas fábricas, aunque esto dependerá en mayor medida de la acogida de su futura gama ‘cero emisiones’, con lo cual habrá que esperar hasta más allá del 2030 para saber si será necesario un apoyo en materia de fabricación de vehículos.