Allá por el año 1969, hace más de 50 años, nacía el Concorde. El avión comercial más rápido del mundo permitía viajar de Londres a Nueva York en menos de tres horas. Los vuelos supersónicos redujeron las distancias, pero el tiempo y los problemas causaron su baja. Boom Supersonic quiere retomar el camino donde se quedó en 2003. El Overture será un avión supersónico que no sólo reducirá el tiempo de viaje, también permitirá volar con neutralidad de emisiones.
Todos recordamos la historia del Concorde. Considerado como una de las maravillas de la aviación, el proyecto anglo-francés marcó un antes y un después en la industria. El avión de pasajeros más rápido del mundo estaba reservado a los viajeros más ricos del mundo, los únicos capaces de pagar los costosos billetes que permitían cruzar el océano Atlántico en menos de tres horas con todo lujo de detalles y comodidades. Tristemente la historia del Concorde acabó de la peor forma en 2003, aunque llevaba muchos años pendiendo de un hilo.
Los altos costes de mantenimiento y el elevado precio de los billetes obligaron a British Airways y a Air France a dejar en tierra el supersónico avión. Desde el 2003 numerosos proyectos han tratado de retomar la senda del Concorde, pero ninguno de ellos ha salido adelante. Donde otros han fracasado, Boom Supersonic espera triunfar. Su propuesta no puede ser más espectacular. El Overture no hace sino recordar al fenestrado avión supersónico, aunque ofrece todas las ventajas de la más avanzada tecnología y sostenibilidad.
La ficha técnica se presenta espectacular. Con una velocidad punta mach 1.7 (2.83 km/h), el Overture sería capaz de hacer recorridos transoceánicos en menos de cuatro horas. Con un diseño aerodinámico que recuerda al del Concorde, cuenta con 61 metros de largo y apenas 32 metros entre las puntas de sus afiladas alas. En su cabina de pasajeros se podría acoger entre 65 y 80 pasajeros, que podrán disfrutar de vuelos a alta velocidad con un techo operativo de 60.000 pies y un alcance máximo de 4888 millas, unos 7867 kilómetros.
Todo ello sin enviar una sola gota contaminante a la atmósfera. Boom Supersonic anuncia que el Overture trabajará exclusivamente con combustibles 100% sintéticos libres de emisiones. Aunque todavía quedan unos años para verlo volar, la empresa ya ha invertido más de 26 millones de horas de trabajo en simulaciones y túneles de viento. Numerosas compañías aéreas ya se han mostrado interesadas. United Airlines ya ha solicitado 15 unidades a Boom Supersonic, aunque todavía queda mucho para que surque los cielos.
Está previsto entre en servicio en más de 600 rutas repartidas por todo el mundo, aunque no se espera que el precio de los billetes sea accesible para todos los bolsillos. Boom Supersonic ha anunciado que no empezará la producción hasta el 2024, tardando mucho más en recibir el visto bueno para emprender los vuelos comerciales. Si todos los planes concurren como está previsto, el Overture empezará su vida comercial a partir del año 2029. Todavía hay que esperar.