Tras afianzar los segmentos superiores, el mercado eléctrico se prepara para una oleada de lanzamientos y presentaciones en las categorías inferiores. Coches pequeños que conseguirán, o al menos intentarán, democratizar la movilidad sostenible. De su éxito depende que Europa consiga alcanzar los objetivos de descarbonización. Muchos aseguran que la pelea será un “baño de sangre”. Muchas unidades llegarán casi a la par y ahora sabemos que BYD pondrá su grano de arena con un coche que ya ha arrasado en el mercado local. Europa contará con el BYD Seagull, aunque no se llamará igual.
La firma china tiene dos series de vehículos: Dynasty y Ocean. Los modelos de la línea Dynasty deben su nombre a algunas de las familias gobernantes más influyentes y poderosas del imperio, tales como Han y Tang. La gama Ocean nombra a sus unidades con temas relacionados con el mundo marino. De ahí que surjan los Seal y Dolphin. Es en esta última familia donde se integra el BYD Seagull (Gaviota). Hace ya casi un año que fue presentado y desde entonces no ha dejado de acaparar la atención de la escena mundial. Su éxito en China ha sido inmediato. En sus primeras 24 horas de vida acumuló más de 10.000 pedidos.
Precio objetivo por debajo de los 20.000 euros antes de ayudas o subvenciones
La fama del Seagull se ha ido expandiendo con el paso de los meses y en apenas medio año de vida ha superado la impresionante cifra de 200.000 unidades fabricadas. Ya es el coche más popular de BYD y nada hace indicar que esa fama vaya a caer. Esas cifras han animado a la compañía a exportarlo al resto del mundo. Durante mucho tiempo se ha estado especulando con una posible llegada a Europa, aunque hasta ahora no hemos podido saber si iba a ser realidad o no. Tal y como ha confirmado la propia marca, el Seagull no sólo llegará al Viejo Continente, sino que sufrirá modificaciones para ajustarse a los gustos de la región.
Europa está considerada como el mercado más exigente del mundo y, por ello, BYD quiere rebautizar el Seagull como BYD Dolphin Mini. Una nomenclatura que indica claramente el posicionamiento del coche. Con apenas 3,78 metros de largo, será un poderoso rival para modelos como el Renault 5, el Dacia Spring o el Citroën ë-C3.
Para equilibrar la balanza de prestaciones y rendimiento, el Dolphin Mini mejorará sus datos de homologación. Gracias a una batería tipo Blade de litio ferrofosfato podrá ofrecer hasta 427 kilómetros de autonomía. Es una cifra realmente impresionante si tenemos en cuenta el tamaño. Sirva como ejemplo que es el mismo rango que obtiene la más eficiente versión del Dolphin.
En cuanto a la carga, BYD asegura que será capaz de recuperar del 30% al 80% de la capacidad de la batería en 29 minutos. Eso quiere decir que el Dolphin Mini no sólo se centrará en la ciudad, sino que podrá salir de ella con cierta soltura.
Por el momento, no se han confirmado plazos de llegada. Se presentará en Europa antes del cierre de este año. Las estimaciones apuntan a que la fase comercial comenzará en el segundo trimestre a un precio por ahora desconocido. Sin embargo, teniendo en cuenta que en China cuesta menos de 10.000 euros al cambio, las unidades europeas podrían tener una tarifa de salida por debajo de los 20.000 € antes de ayudas.