El CEO del grupo automovilístico, Carlos Tavares, ha afirmado que la tecnología en los vehículos eléctricos no ha sido lo suficientemente económica para lograr una transición hacia la descarbonización de la movilidad en todos los niveles sociales.
"Está claro que la tecnología del vehículo eléctrico está ciertamente en el camino equivocado para ser más asequible, y hemos estado explicándolo por un tiempo. Tomará un tiempo para hacer la movilidad más limpia y asequible", ha explicado el directivo en el segundo debate anual del Freedom Mobility Forum llevado a cabo este miércoles.
Tavares ha contestado así ante al planteamiento de cómo hacer más accesible el vehículo eléctrico y la movilidad electrificada, sobre todo para las clases medias y grupos económicamente excluidos.
"Como sabemos, en Asia podemos encontrar soluciones mucho más competitivas ahora mismo de esa misma tecnología, lo que significa que el mundo occidental se enfrentará a un cambio muy significativo, un cambio 'darwiniano', en términos de impacto en la producción, empezando con Alemania, pero también en el mundo occidental y veremos cómo nuestras sociedades van a reaccionar", ha añadido Tavares.
Un debate que va más allá del coche barato
El debate compuesto por cinco panelistas expertos en las áreas de tecnología e inteligencia artificial, medio ambiente y energía y economía y justicia social, abordó la cuestión principal de la edición de este foro que planteaba la pregunta "¿Cómo el planeta puede acomodar las necesidades de movilidad de 8.000 millones de personas?".
En este sentido, ante la cuestión de los combustibles alternativos y biocombustibles como solución de movilidad en la transición energética, Tavares ha afirmado que "deberíamos alejarnos del punto de vista dogmático en el que una medida encaja todo", refiriéndose a la electrificación, y ha señalado que los vehículos eléctricos necesitan de "un avance significativo", ya que utilizan 500 kg adicionales por las materias raras incorporadas en las baterías que los propulsan.
"Desde un punto de vista ambiental, añadir 500 kg más de materias raras adicionales no parece una solución muy razonable. Así que es claro que la industria, basada en nuevos ingredientes químicos, necesita alcanzar en las próximas décadas un avance en la densidad de las celdas de energía para que reduzcamos al menos el 50% el peso el uso de materias raras en los vehículos eléctricos", ha indicado.
Además, ha sostenido que aunque los biocomubustibles como el etanol "son una buena solución" para la movilidad, estos no deben contraponerse "a la alimentación y a la agricultura", ya que "necesitan una cantidad significativa de tierra para que puedan producirse". "Los biocombustible son una buena solución entre el portafolio de soluciones que, pragmáticamente, necesitamos usar. Y yo coincido en que, con una situación razonable como la que conocemos hoy en Brasil funcionan tan bien como el vehículo eléctrico dentro del 'mix' energético en Europa, por lo que la huella de carbono es bastante eficiente. Es una de las soluciones que tenemos", ha dicho Tavares.
Por último, el directivo de Stellantis ha sostenido que la desaparición del coche privado en las ciudades y la utilización del transporte público como única solución de movilidad para el futuro no sería correcta, ya que en el pasado se ha demostrado que este esquema no ha funcionado. "Si el transporte público fuera la respuesta correcta, y puede serlo, no estoy diciendo que no lo sea, la pregunta es, ¿por qué no funcionó en los últimos 70 años? Se han hecho muchos intentos, se han realizado muchas inversiones, muchas ciudades lo han intentado, pero la mayoría ha fracasado", ha expresado.
Tavares, que ha puesto de ejemplo nuevas soluciones en las que el mismo grupo de automoción está invirtiendo, como el 'car-sharing', ha apuntado que en el transporte público está cambiando el enfoque, mejorándolo con nuevas tecnologías como la inteligencia artifical. "Creo que es un enfoque diferente en la forma en que entendemos las necesidades de las personas y la forma en que procesamos los datos y entendemos dónde deberíamos poner la capacidad y cuándo optimizar la conveniencia y reducir las emisiones", ha añadido.
Resultados de una gran encuesta de movilidad
En el mismo evento, organizado por Stellantis en conjunto con la consultora internacional Wavestone y cuyo eje temático este año ha sido el cómo adaptar las necesidades de movilidad de 8.000 millones de personas, se han presentado los resultados de un estudio llevado a cabo por la plataforma YouGov en cinco países: Brasil, Francia, India, Marruecos y EE.UU., a través de una encuesta realizada a 5.000 personas.
El principal resultado del informe ha sido que uno de cada cuatro ciudadanos no está preparado para elegir modos de transporte más 'eco-friendly' y cambiar así sus hábitos de movilidad. Esto es particularmente notable en EE.UU., donde más de la mitad de los encuestados en las zonas rurales dijeron que no estaban dispuestos a cambiar nada.
Asimismo, el estudió evidencia que tres de cada cuatro personas se están preparando para opciones más ecológicas en su movilidad, y menos del 10% ya han hecho cambios profundos, lo que indica que la población se está preparando para llevar a cabo cambios mayores, indica. También, que seis de cada 10 ciudadanos están dispuestos a abandonar el transporte individual, pero el entusiasmo varía según el mapa, con India, Brasil y Marruecos a la cabeza.
Esto se compara con una disposición del 50% o menos en los mercados maduros -un factor que cae al 28% en las zonas rurales de EE.UU., donde puede haber menos disponibilidad de transporte público-.
El informe también preguntaba "¿quién está dirigiendo esta revolución verde?", a lo que los encuestados han respondido que está en manos de los legisladores (36%) y los ciudadanos (33%), colocando a las compañías a la cola (26%), excepto en EE.UU. donde las empresas ocupan el segundo puesto (33%) por delante de los ciudadanos (25%). Finalmente, el estudio refleja que uno de cada cuatro ciudadanos del mundo cree que los jóvenes "tienen la clave de nuestro futuro verde", y un 40% en la India cree que puede encabezar el cambio.