En 2018, la empresa israelí City Transformer presentaba un concepto de cuadriciclo eléctrico plegable especialmente diseñado para facilitar el aparcamiento en las ciudades. Un mecanismo patentado por la propia empresa permite que su plataforma cambie de dimensiones. Durante la conducción tiene la anchura de un automóvil de pasajeros convencional, mientras que, en modo estacionamiento, su anchura es la de una motocicleta. Ahora, tres años después, el proyecto vuelve a tomar fuerza con la presentación de la versión de producción en el Salón del Automóvil de Múnich.
El City Transformer es un vehículo eléctrico de pequeñas dimensiones, en concreto 2,5 metros de largo, que se construye a partir de un chasis retráctil con un mecanismo capaz de empujar las ruedas hacia fuera para circular con mayor estabilidad a altas velocidades y que las empuja hacia dentro cuando tiene que maniobrar o estacionar en espacios reducidos.
El chasis del City Transformer permite ensanchar el coche 40 centímetros pasando de 100 centímetros a 140 centímetros.
Una cabina angular en la que el frontal está presidido por una barra de luz led diurna que ocupa el ancho completo recuerda lejanamente al Renault Twizy. En cualquier caso, probablemente el cuadriciclo eléctrico francés ha inspirado a muchos pequeños vehículos urbanos de bajo coste que se han presentado desde que la marca francesa lo puso a la venta. Con unas dimensiones de 250 cm de largo y 140 cm de ancho (desplegado) el cuadriciclo eléctrico israelí es muy similar al francés en cuanto a su tamaño (234 x 124 cm).
Su diferencia con él es la capacidad de su chasis para cambiar de ancho y ofrecer la estabilidad de un coche en vías rápidas y la maniobrabilidad de una moto en las calles de las ciudades. Cuando se repliegan sus ruedas el ancho queda reducido a 100 cm, un ajuste que puede realizarse en movimiento, lo que permite a los conductores decidir sobre la marcha cual es la configuración más adecuada en cada momento. Con tan solo un metro de ancho, aparcar el City Transformer es casi tan sencillo como aparcar una motocicleta. Tiene un diámetro de giro de 8,5 metros y cuenta con frenos de disco delanteros y traseros, ABS y control electrónico de estabilidad.
El City Transformer ofrece la misma movilidad que un coche convencional facilitando los desplazamientos y asegurando un mínimo gasto energético.
Según el equipo de diseño del City Transformer, el vehículo puede ser una solución lógica para el congestionado tráfico urbano en las que la búsqueda de aparcamiento suele ser un problema diario. Muchas de las personas que se desplazan habitualmente por las ciudades lo hacen en vehículos de cinco plazas, con la mayoría de ellas desocupadas y requiriendo una gran cantidad de energía para trasladarse a una velocidad habitualmente muy lenta. Además, al tratarse de un vehículo eléctrico, también está exento de las restricciones al acceso a algunas zonas particularmente protegidas en los cascos de las ciudades.
El tren de potencia del City Transformer está formado por dos motores eléctricos, cada uno de ellos de 7,5 kW de potencia (10 CV), situados en cada una de las ruedas traseras, de manera que la potencia total conjunta es de 20 CV, suficientes para alcanzar una velocidad máxima de 90 km/h cuando las ruedas se encuentras desplegadas y de 40 km/h cuando se encuentran recogidas. En cuanto a su batería, de la que se desconoce la capacidad, debería ser capaz de ofrecer entre 120 y 180 kilómetros con cada carga y, lo que es más importante, puede recargarse rápidamente hasta el 80 % en aproximadamente 30 minutos.
El interior del City Transformer, sin lujos, ofrece capacidad para dos adultos en tándem o para un adulto y dos niños en la versión que se lanzará más adelante.
A la cabina de 158 cm de altura se accede mediante dos puertas batientes (similares a las del Twizy, aunque en este eran opcionales). En su interior pueden viajar el conductor y un pasajero, situados uno detrás de otro. City Transformer ha anunciado su intención de crear una segunda versión que permitirá que en la parte trasera puedan viajar dos niños. El interior no ofrece grandes lujos pero cuenta con aire acondicionado, espacio para colocar lo que se lleva en los bolsillos, los mandos habituales de un coche sencillo, una pantalla informativa y, para mayor seguridad, al menos un airbag para el conductor, aunque es posible montar más.
Después de desarrollar su primer prototipo en 2019, City Transformer ha presentado la versión de producción en el IAA Mobility de Múnich con la intención de iniciar la producción en pequeñas cantidades en 2022. Para ello, antes deberá pasar los trámites necesarios para que sea homologado como un cuadriciclo L7e en la Unión Europea. El objetivo inicial es ofrecérselo a los gestores de flotas. A partir de ahí, su plan es aumentar la producción mediante asociaciones con empresas ensambladoras para poder entregar las primeras unidades a los particulares en 2024.
La empresa ya ha abierto los pedidos anticipados a través de su web que permitirán acceder al City Transformer a un precio reducido de 12.500 euros. Para ello es necesario anticipar un depósito que sirve como señal de 150 euros. Posteriormente, el precio de venta se elevará hasta los 16.000 euros aproximadamente.