La Serie E1 es una nueva categoría que ha nacido con la intención de ser la Formula E en versión marítima. Es la primera vez que se lleva a cabo una competición específica con lanchas eléctricas de gran potencia, y hoy ya hemos conocido qué aspecto tendrán sus componentes.
La Serie E1 nace bajo el mismo paraguas de los fundadores de la Fórmula E y el Extreme E, dos categorías que han marcado un gran antes y después dentro de la competición, siendo pioneras en la inserción de vehículos completamente eléctricos. Esta competición tendrá a 12 equipos integrando la parrilla de salida, que llevarán a cabo una serie de recorridos técnicos a lo largo de diferentes poblaciones costeras y podrán alcanzar velocidades por encima de 60 nudos (110 km/h). Las pruebas tendrán una estructura de fases eliminatorias a través de una carrera contrarreloj.
Estéticamente tendrá unas medidas de unos 7 metros de longitud por unos 3 metros de ancho. Una vez navegue a gran velocidad una serie de hidroalas de 400 mm de altura, aportarán el equilibrio y la maniobrabilidad necesaria al navío. Su construcción será realizada íntegramente en una combinación de materiales de carbono y fibras naturales, para que el resultado final no vaya más allá de los 800 kilos de peso. La construcción de estas embarcaciones se llevará a cabo en Pisa, Italia, por la empresa Victory Marine.
Lancha eléctrica de la Serie E1.
La idea principal de sus creadores siempre ha sido la de primar la seguridad de sus pilotos, así como adaptar toda la vanguardia tecnológica disponible en la actualidad. Por ello, su diseño es aparentemente bastante futurista, con un gigantesco morro alargado y una cabina interna protegida, donde se encontrarán los competidores (un hombre y una mujer) del equipo en cuestión.
El propio nombre de estas embarcaciones (RaceBird) hace referencia a los pájaros que vuelan a gran velocidad sobre la superficie del mar, generando este símil por la propia velocidad que alcanzarán estos navíos y la pequeña elevación que sufrirá en ese momento, realizando su recorrido prácticamente unidos al agua sólo a través de sus hidroalas situadas en los extremos del mismo.
Según Sophi Horne, encargada de llevar a cabo el diseño de estas lanchas, la imagen se ha tomado de una hoja en blanco, ya que no ha tenido referencia externa de ningún tipo. Únicamente se ha decantado por realizar una estructura ligera, tecnológica, eficiente y segura. La pregunta que solía hacerse era cómo llevar el formato de las carreras a unos barcos eléctricos. Como protagonista de prácticamente todas las competiciones de velocidad, aquí también prima la aerodinámica del conjunto.
Lancha eléctrica de la Serie E1.
Aún se desconoce el tren motriz y el sistema eléctrico que equiparán estas lanchas, aunque no tardaremos en salir de dudas ya que entrarán en fase de producción en las próximas semanas, será cuando se desvelarán todas las dudas mecánicas que adoptarán. Cada barco será alquilado por los equipos durante una o varias temporadas, y podrán llevar a cabo una decoración específica sobre él.
La competición, al igual que ya hemos visto en la Extreme E, se llevará a cabo en aproximadamente 10 carreras ubicadas en distintos lugares de todo el mundo, siendo la mitad de ellos desde puertos de las propias capitales de ciudad que deberán estar equipados con estaciones de recarga. Esto último, la Serie E1 se compromete a llevar a cabo su instalación, la cual se quedará una vez haya concluido la carrera, en favor de incentivar la adquisición de barcos movidos por electricidad. Su puesta en marcha tendrá lugar en el año 2023.