Continental, la empresa alemana de tecnología, ha agregado un nuevo nivel de seguridad a su sistema de conducción autónoma. La compañía está utilizando un sistema denominado Safety Domain Control Unit (SDCU) para reforzar la seguridad del piloto y los pasajeros en los coches sin conductor.
La empresa utilizará el SDCU como ruta alternativa para detener el vehículo de forma segura, cuando el controlador autónomo principal no responda a tiempo. El nuevo parámetro de seguridad de Continental también se encargará de activar los airbags en caso de una colisión.
"La respuesta ante situaciones críticas de seguridad debe ofrecerla el coche, ya que no le puedes pedir al conductor que tome el control inmediatamente después de una avería", aseguró Maged Khalil, director de tecnología y seguridad de Continental, al sitio Autocar Professional.
La compañía dice que, por lo tanto, cada vehículo autónomo de Nivel 4 debe poder detenerse de forma automática en cualquier escenario de falla técnica. Si a pesar de haber sido solicitado el frenado, el sistema principal del coche no toma medidas, el automóvil realizará una maniobra de riesgo mínimo. El vehículo conducirá automáticamente al carril de avería y allí se detendrá. Si se registra una falla en el coche, se encenderán las luces de emergencia y la velocidad disminuirá hasta encontrar un lugar adecuado para detenerse de manera segura.
"Si ocurre una falla, esto significa que el vehículo aún puede detenerse de manera segura incluso sin la intervención del conductor. Este elemento de confianza es clave para la aceptación de la conducción autónoma", acotó Khalil.
Bardo Peters, jefe de innovación y seguridad de los pasajeros de Continental, destaca la importancia del doble sistema de seguridad que tendrán los coches autónomos. "Solo de esta forma pueden cubrirse todos los posibles escenarios de falla", aseguró el directivo.