Es habitual ver a jefes de Estados y presidentes del gobierno utilizando coches patrios, es decir, de una marca de su país (en aquellos donde es posible). La reina Isabel II se desplaza en Bentley o Range Rover, a Angela Merkel se le ha visto acudir a eventos oficiales en Audi o Mercedes-Benz y las limusinas presidenciales de Estados Unidos llevan el logo de Cadillac. Y en el caso de los mandatarios franceses, la elección se disputa entre Peugeot, Citroën y DS. Esta última ha sido la elegida para el nuevo coche de Emmanuel Macron.
El Presidente de la República de Francia, Emmanuel Macron, tiene un nuevo coche oficial. Se trata de un DS 7 Croosback Élysée, pero no uno cualquiera. El nuevo coche presidencial francés toma la base del DS 7 Crossback que podrías ir a comprar al concesionario, pero la marca ha hecho varios cambios para adaptarlo a las necesidades del máximo representante de Francia.
En este detalle de la decoración del retrovisor se puede apreciar también el blindaje de las ventanillas.
Así las cosas, para cumplir con las especificaciones de la Presidencia de la República, el DS 7 Crossback Élysée que utilizará Macron como coche oficial es 20 centímetros más largo que un DS 7 Crossback normal, alcanzando los 2,94 metros de distancia entre ejes y 4,79 metros de longitud total. El coche se ha alargado desde el pilar central con la idea de ofrecer mayor espacio en las plazas traseras y ser una herramienta de trabajo más cómoda. Gracias a este aumento de longitud, el espacio para las piernas alcanza los 545 milímetros.
Además, la butaca trasera ha sido sustituida por dos asientos independientes climatizados separados por un reposabrazos que incorpora todo lo fundamental en una "oficina móvil": cargador inalámbrico para el móvil, puertos USB y un portadocumentos en la parte central. Todo ello rodeado de una tapicería de cuero Negro y un techo de Alcantara.
Las parte trasera ha sido ampliamente modificada para convertirla en una oficina móvil.
Los cambios no terminan aquí. El DS 7 Crossback Élysée presidencial equipa luces intermitentes de color azul/rojo en la parte delantera, portabanderas extraíbles en las aletas delanteras, logos 'RF' (por 'République française') en las puertas delanteras, emblemas tricolor con la bandera francesa en la parte delantera y el maletero, y llantas de 20 pulgadas específicas con neumáticos anti pinchazos. En lo que a seguridad se refiere, también equipa una antena para el sistema de telecomunicaciones reservado a la Presidencia de la República y, lógicamente, un blindaje integral de chasis y cristales. Por motivos de seguridad, los detalles relativos al blindaje no han sido publicados.
En cuanto a la mecánica, el DS 7 Crossback Élysée esconde en sus entrañas la motorización híbrida enchufable E-TENSE de 300 caballos y tracción 4x4. La mecánica híbrida enchufable del coche está formada por un motor de gasolina de 200 CV y 300 Nm de par, situado en el eje delantero, y dos motores eléctricos: uno en el eje delantero con 110 CV de potencia y 320 Nm de par y otro en la parte trasera, con 113 CV y 166 Nm de par, que mueve únicamente las ruedas traseras y confiere la tracción 4x4 cuando es necesario. La potencia máxima total alcanza los 300 caballos y el par asciende a 520 Newton-metro. La batería tiene 13,2 kWh de capacidad y ofrece 57 kilómetros de autonomía en modo eléctrico (WLTP), que quizá se vean afectados por el aumento de peso que supone el blindaje.
DS 7 Crossback Élysée presidencial.
El DS 7 Crossback Élysée ha hecho su primera aparición durante las ceremonias de conmemoración del armisticio del 11 de noviembre de 1918, iniciando así su entrada en la flota de la Presidencia de la República Francesa. No es la primera vez que Macron sube a bordo de este modelo, pues durante su investidura en 2017, el presidente de la República recorrió los Campos Elíseos a bordo de un DS 7 Presidential Crossback.