Estados Unidos necesitará más de 330.000 nuevos puntos de recarga públicos y sumar al menos 14 millones de nuevos vehículos enchufables en sus carreteras antes de 2025, para cumplir los objetivos del Acuerdo de París (COP 21). Esta es la conclusión principal de un informe del CAP (Center for American Progress) que analiza el estado actual de la red de carga de Estados Unidos y los fondos disponibles para implementarla y alcanzar los acuerdos firmados en París. En el estudio se específican las actuaciones que serán necesarias para asegurar que esta infraestructura de recarga esté disponible a tiempo.
El informe advierte que el estado federal debería implementar medidas de mayor calado, involucrando a todos los estados. A nivel local, muchos de los estados sí están poniendo en marcha las acciones oportunas para establecer una correcta red de recarga rápida en corriente continua junto con una red de carga semirrápida en alterna, pero a nivel federal las iniciativas se antojan insuficientes para lograr los objetivos.
Evolución de las ventas anuales de vehículos enchufables (naranja) y proyección necesaria para logar los objetivos la COP 21 (rojo). Fuente: Aliance of Automobile Manufactures.
Los fondos disponibles para la instalación de esta infraestructura de recarga están compuestos por los que ofrece cada estado y por los comprometidos por Volkswagen tras el dieselgate. El grupo automovilístico ha acordado con el CARB (California Air Resources Board), y con la Agencia de Protección Ambiental (EPA), la inversión de 2.800 millones de dólares después de que se descubriese el uso de dispositivos electrónicos por parte de Volkswagen para modificar las emisiones de los vehículos diésel.
Según el informe, la suma de estos dos fondos cubrirían el despliegue de la mitad de la infraestructura de recarga pública necesaria hasta 2025. Su conclusión es que, para poder alcanzar el objetivo por completo, es necesario un incremento de los recursos públicos y una mayor inversión privada, que cierre la brecha restante, estimada en 2.300 millones de dólares.
Evolución de los fondos existentes (suma de los fondos estatales y de la aportación de Volkswagen) para la implementación de infraestructura de recarga pública y fondos necesarios resultantes.
A nivel de cada estado, para poder alcanzar nuevos mecanismos de financiación a medida que se agoten los fondos existentes, cada uno de ellos deberá trabajar para lograr nuevas inversiones. El informe sugiere la solicitud de inversiones federales y la unión y creación de programas conjuntos para generar ingresos. Por otro lado es necesaria una inversión privada adicional y la extensión de los créditos federales para la ayuda a la instalación de infraestructura de recarga, que expiraron en el año 2017.