Como bien es sabido, en Mercedes-Benz llevan unos años apostándolo todo a la electrificación. Este hecho ha llevado a la firma a eliminar incluso algún modelo de cara a próximas generaciones debido a que no tendría mucho futuro como eléctrico (caso del Clase A, por ejemplo). Y es que en la firma germana prefieren apostarlo todo a las mecánicas ya conocidas y proyectos casi ‘asegurados’; es decir, de poco riesgo. Tanto es así que han eliminado uno muy prometedor.
En otras compañías se han dejado ver los llamados modelos eléctricos con extensor de rango. Estos, particularmente, podrían describirse como coches eléctricos que adoptan también un pequeño motor térmico que funciona como cargador para su batería. Esto genera un menor peso (por la menor necesidad de una batería más grande) y una autonomía mucho más generosa. Sin embargo, en Mercedes-Benz no lo ven viable.
Mercedes le dice adiós a un prometedor proyecto
Ha sido el medio Autocar quienes se han percatado de esta supresión en el proyecto de nuevos modelos o nuevas alternativas de movilidad, algo que en la marca habría sido totalmente nuevo. Pero esto no conlleva a que no haya sido una tecnología que hayan estudiado y probado hasta justo el momento previo de su ‘luz verde’. Una fuente anónima familiarizada con este proyecto habría confirmado al mencionado medio su cancelación absoluta.
“Hemos creado prototipos de extensión de rango basados en modelos existentes, tanto para pruebas de laboratorio como para pruebas en carretera. Pero al final llegamos a la conclusión de que la transmisión con extensor de autonomía es una tecnología de transición con beneficios relativamente a corto plazo en términos de ventas y costes de producción comparativamente altos”, afirmó la fuente anónima.
Según afirma esta misma persona, Mercedes habría desarrollado (o comenzado a desarrollar) este tipo de tecnología sobre el Mercedes EQS. A este se le insertó un pequeño motor turboalimentado de dos cilindros y 1.0 litros de cubicaje montado sobre el tren delantero que funcionará meramente como generador de energía para la batería.
Al mismo tiempo, este prototipo del Mercedes EQS podría recargar su batería a través de un enchufe vía corriente continua o corriente alterna, de igual forma a la que lo hace a día de hoy en su versión 100% eléctrica. Todo ello, según confirma Autocar, daba como resultado una autonomía de casi 800 kilómetros sobre el EQS 450+ de propulsión trasera.
De haberse hecho realidad tal modelo habría sido el primero de su clase (al menos entre los fabricantes clásicos europeos) al presentarse como todo un buque insignia de lujo con mecánica eléctrica con extensor de rango. En otras marcas ya existe y se comercializa este tipo de tecnología, como el Mazda MX-30 R-EV o el Nissan Qashqai e-Power, entre otros. Sin embargo, ninguna de las tres conocidas marcas alemanas (BMW, Audi o Mercedes) había probado esta tecnología antes.