El mercado del automóvil global se ha convertido en un escenario en el que los que quieren dominar tienen que estar dispuestos a hacer cambios y adaptarse a las nuevas tendencias antes que el resto. En este sentido, Toyota innovó sobremanera hace más de 20 años al lanzar el primer coche híbrido fabricado en serie, algo que ahora está haciendo que se desmarque en gran medida del resto de fabricantes a nivel mundial.
Lo anterior ha llevado a la marca a disfrutar de una privilegiada posición en el mercado en un momento en el que el resto de fabricantes ha apostado más fuerte por desarrollar coches eléctricos que híbridos, sin que esto se haya visto compensado en el apartado comercial, pues la demanda está centrándose en estos últimos compases en la tecnología híbrida en lugar de la eléctrica, que además tiene un coste de desarrollo mucho más alto, lo que está generando incertidumbre en torno a las inversiones en este sector.
Tal y como ha señalado un reciente informe publicado en China, el fabricante japonés ha conseguido en lo que va de 2024 (hasta el mes de julio, inclusive) un total de casi 4,6 millones de ventas. Una cifra que ha hecho que marque distancias con el que hasta la fecha siempre ha sido su principal competidor, el Grupo Volkswagen.
Los alemanes, en su caso, han tenido que conformarse durante el mismo periodo con 2,61 millones de unidades, evidenciando que se encuentran en la necesidad de transformar su gama de productos, tanto en el sentido tecnológico como en la manera que tiene de comercializarlos.
De hecho, estos días ha salido a luz el hecho de que la marca está valorando el cierre de hasta dos de sus fábricas en Europa a causa del volumen de producción y ventas que ha perdido. Todo esto, en un escenario en el que las nuevas firmas chinas buscan traer a Europa la producción de sus coches, motivadas por las buenas cifras de ventas que están empezando a conseguir aquí, sobre todo SAIC de la mano de MG.
En contrapartida a la situación del fabricante alemán, la china BYD ha logrado un ascenso impresionante, alcanzando la octava posición global con 1,71 millones de coches puestos en las calles de todo el mundo (aunque casi todas son ventas relativas a China) e incluso llegando a ser el tercer fabricante por volumen durante el mes de julio, sólo por detrás de Toyota y el Grupo Volkswagen, gracias a las más de 315.000 unidades vendidas hasta agosto de 2024.
