La era eléctrica ha abierto la veda para que nuevos actores se sumen al escenario mundial de la industria de la automoción. El cambio de paradigma ha supuesto un cambio en el status quo, China ha despuntado como el mayor mercado del mundo y cada vez más países buscan hacerse un hueco en la industria. Turquía es el último de ellos. Acaba de lanzar en Europa su primera marca de coches eléctricos. Se llama Togg y llega con un más que interesante vehículo bajo el brazo, el T10F, presentado en el CES de Las Vegas que ha abierto sus puertas esta misma semana.
La verdad es que esta no es la primera vez que hablamos de esta compañía turca de coches eléctricos. Allá por el 2019 te adelantamos los primeros planes y lanzamientos. Togg es el acrónimo de Türkiye'nin Otomobili Girişim Grubu (Grupo de Empresas de Automóviles de Turquía), un conglomerado formado por cinco grandes empresas del sector financiadas por el Ministerio de Industria. El objetivo, al igual que el de muchas otras empresas, es hacerse un hueco en el cada vez más numeroso escenario eléctrico mundial, principalmente el europeo. Su primer adelanto fue el Togg T10X, un SUV compacto y eléctrico capaz de anunciar una autonomía de hasta 523 kilómetros.
Una interesante berlina con cuatro pantallas en su interior
Recientemente, la compañía ha asegurado que estará en disposición de vender sus coches en Alemania a finales de este mismo año. Dos serán las unidades que comercializará, el T10X y el nuevo T10F. Ambos apuestan por el segmento más comercial de Europa, el de los compactos, pero mientras que uno se adentra en el terreno de los SUV, el T10F puede considerarse como una berlina fastback. Su diseño es realmente atractivo, destacando particularmente la agresiva línea del techo que cae hasta una trasera extendida a través de un gran voladizo.
Emplea la misma plataforma y estructura que el T10X. Un chasis preparado exclusivamente para albergar sistemas eléctricos con uno o dos motores y diferentes configuraciones de batería. Tal y como ha anunciado la compañía, la versión RWD exprime 160 kW/215 CV de potencia y 350 Nm de par motor. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7,2 segundos.
La unidad de motor dual y tracción total duplica las cifras de rendimiento, 320 kW/430 CV y 700 Nm de par motor con una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos. Aunque todavía no se ha comunicado el tamaño de la batería, Togg avisa de que el T10F es capaz de homologar 600 kilómetros de autonomía máxima con una potencia de carga de 180 kW en corriente continua que le permitirá pasar del 20% al 80% en 28 minutos. Contará de serie con un sistema de carga bidireccional V2L.
Todo ello se completará con un impresionante despliegue de tecnología. De puertas para adentro, ofrece una llamativa presentación de pantallas que ha corrido a cargo del estudio de diseño Pininfarina. Habrá dos niveles de equipamiento: V1 y V2. Cuatro serán las pantallas implementadas, la del salpicadero con un tamaño total de 41,3 pulgadas. También hay que sumar un display inferior centrado en la climatización con 8 pulgadas. Todo el sistema está controlado por un procesador de última generación de Snapdragon que incluye un sistema de conectividad mediante una aplicación móvil.
Togg fabricará la berlina en las instalaciones de la sede central, en Gebze, Turquía. Desde allí los coches serán introducidos en el mercado local y, a partir de finales de este año, también lo harán en Europa. Por el momento, no hay precios confirmados, aunque la compañía quiere mantener la misma política que con el T10X. El SUV está disponible en un abanico de precios entre los 45.000 y los 57.320 euros. Es posible que el T10F reduzca las tarifas al tratarse de una berlina, pero no será hasta el último tercio del año cuando se anuncien oficialmente.