La industria del automóvil se encuentra en una etapa de transición marcada por la llegada del coche eléctrico como relevo total o parcial al coche térmico. En escena, e impulsando fuertemente este cambio, han aparecido punteros fabricantes como BYD o Tesla que han absorvido un gran cuota de mercado a costa de marcas que, aunque antaño disfrutaran de grandes cifras de ventas, en la actualidad se han visto arrinconadas de tal manera que, en muchos casos, se han acercado o declarado totalmente en quiebra.
Este ha sido exactamente el caso de Ssangyong, cuya vida ha estado pendiendo de un hilo durante los últimos dos años, desde que se declarase en quiebra. Por suerte para la marca y toda su estructura industrial y comercial ha aparecido una empresa inversora, KG Group, quien el pasado verano a través de un desembolso superior a los 700 millones de euros se convirtió en el accionista principal de Ssangyong, sacando al fabricante coreano de la situación.
Hace meses Ssangoyong pasó a denominarse en España oficialmente KGM, de KG Mobility, un nuevo nombre que busca adecuarse más a los cambios que está sufriendo la industria y con el que la renovada marca pretende volver a disfrutar de mayores cifras de ventas.
A decir verdad, la gama de Ssangyong estos últimos años ha tenido pocos cambios que permitieran a sus coches enfrentarse por los números de su ficha técnica y soluciones a modelos comparables por precio y tamaño.
Esto, no obstante, ha cambiado desde la llegada del KGM Torres a la gama de la firma, un proyecto que vio la luz justo antes de la adquisición por parte de KG y que ha puesto en el mercado todo un D-SUV, de tamaño equivalente a un Toyota RAV4, por unos 10.000 euros menos. De momento sólo está disponible con una versión de gasolina, pero está previsto que en no demasiado tiempo acabe llegando una versión eléctrica denominada Torres EVX cuya autonomía homologada será de unos 500 kilómetros.
También está previsto que a corto plazo reciba cambios el modelo que hasta la llegada del Torres ha sido el más importante para la marca, el Korando y su versión eléctrica E-motion. Actualmente el Korando eléctrico rinde 190 CV de potencia, pero en su mercado de origen se ha presentado una versión más potente, que llega a los 207 CV, y que hace uso de una batería de química LFP de mayor capacidad que pasa de 61,5 a 73,4 kWh netos, con lo que también debería aproximarse a los 500 kilómetros de autonomía.