Haciendo uso de una mecánica a medio camino entre una híbrida enchufable y una eléctrica gracias a baterías de gran tamaño para tratarse de coches de este tipo, y una carrocería familiar típica de las marcas europeas más castizas, como Volvo, Neta ha presentado la variante ranchera o wagon del Neta S, una berlina que a caballe entre los segmentos D y E planea su irrupción comercial en nuestro mercado.
Por cómo trascienden las presentaciones de muchos coches en China, lo cierto es que la información oficial que se tiene del modelo es imprecisa, más allá de las imágenes que acompañan estas líneas, que sí tienen origen oficial. No está claro cómo la marca lo ha denominado oficialmente, pues muchos apuntan a que llegará como Neta S Hunting Edition, y otros como Neta S Shooting Brake.
Sea como fuere, a tenor del paso previo del modelo por el MIIT, son exactamente 4,98 metros los que tiene de longitud total exterior, lo que unido a una distancia entre los ejes de las ruedas delanteras y traseras de 2,98 metros da lugar a un habitáculo capaz de ofrecer 593 litros de volumen. Esta capacidad de carga, sin embargo, es contando con el maletero ubicado bajo el capó. Asumiendo que como máximo ofrezca unos 50 litros de volumen, el maletero principal del este Neta S familiar debería tener unos 540 litros, en línea de lo visto en coches de tecnología y tamaño similar.
Presentado en principio como un coche 100 % eléctrico, a las variantes de tracción trasera y 272 CV de potencia y a la tracción total y 460 CV, se suma una que la marca cataloga como eléctrica de rango extendido (EREV), aunque lo cierto es que cuadra más por lo que se entiende como un híbrido enchufable, pues la mayor parte de su autonomía procede del motor térmico, a pesar de que este no pueda propulsar las ruedas por su propia cuenta y que las baterías en las dos versiones son de gran tamaño.
Habrá dos variantes de esta última mecánica, diferenciadas entre sí por su batería, que pueden ser de 31,71 kWh y 43,88 kWh de capacidad, gracias a las que logra autonomías de 130 y 185 kilómetros, según ha detallado la marca en el MIIT. Las dos recurrirán al mismo esquema compuesto por un motor de gasolino 1,5 litros de capacidad y 94 CV (70 kW) y un eléctrico de 272 CV (200 kW).
Este tipo de mecánicas puede jugar un papel crucial en la transición al coche eléctrico, pues junto a las híbridas enchufables proponen un rango de uso en modo eléctrico que realmente sí puede hacer que, en el día a día, se deje completamente de lado el motor de combustión. BYD en sus primeros pasos en Europa ya se ha percatado de ello, y por esto mismo ha traído rápidamente a nuestro mercado el Seal U DM-i, al que seguirán más modelos del fabricante chino que traerán consigo el estreno de la quinta generación de sus sitemas híbridos enchufables.
Neta, por su parte, tiene previsto dar comienzo a su actividad comercial en Europa el próximo año, para lo que ya creó una filial el pasado año que se encuentra preparando el lanzamiento en nuesto mercado de los coches de Neta. Además del Neta S, la marca también tiene previsto traar aquí el Neta Hozon, un coupé eléctrico del segmento D similar al BMW Serie 4.
