El grupo chino Evergrande, que recientemente adquirió al fabricante sueco NEVS (antigua SAAB) ha comprado el 58% de las acciones de la compañía Cenat New Energy, especializada en la producción de unidades de carga. El conglomerado del gigante asiático ha invertido 1.060 millones de yuanes –unos 137 millones de euros– en la operación.
Se trata de un nuevo movimiento de Evergrande en su camino hacia la movilidad eléctrica. La adquisición de NEVS hace unas semanas invitaba a pensar que el grupo chino necesitaría de nuevos proveedores para la producción de los vehículos eléctricos del fabricante sueco. La compra de Cenat supone integrar a una plantilla de alrededor de 1.800 empleados: 300 expertos del departamento de I+D+i y otros 1.500 trabajadores del equipo técnico. También adquiere cuatro importantes centros de desarrollo: los centros de Shanghái, Jiangxi, Guangxi y Jiangsu, que cuentan con las tecnologías más innovadoras del mercado chino.
La compra de Cenat y la de NEVS se suman a una etapa de cambio en el grupo chino. En junio de 2018 se hizo con el fabricante californiano Faraday Future, una startup especializada en vehículos eléctricos de altas prestaciones; en septiembre, Evergrande anunció que llegó a un acuerdo de cooperación estratégico con Xinjian Guanghui, uno de los mayores grupos de concesionarios de China. Su último movimiento hasta ahora fue la fundación de la compañía Evergrande Smart Charging Technology, una filial diseñada para la provisión de infraestructura de carga para eléctricos.
Gracias a los nuevos cuatro centros adquiridos, Evergrande espera aumentar la producción anual a 60 GWh en los próximos diez años.