El nuevo SUV eléctrico que llegará a Europa el próximo 2023 lo hará, en un primer momento, bajo ciertas limitaciones técnicas. La propia marca ha confirmado que es tan elevada su cifra de reservas que se ven obligados a iniciar su producción incluso antes de concluir el desarrollo de algunos elementos tecnológicos. No obstante, estos serán cubiertos más adelante a través de actualizaciones inalámbricas una vez estén listos para salir al mercado.
El Fisker Ocean ha hecho correr ríos de tinta gracias a unas buenas cifras de reservas. El SUV eléctrico ha firmado más de 62.000 reservas confirmadas a finales de octubre. El modelo que llegará a Europa en 2023 espera competir directamente con alternativas como el Tesla Model Y, entre otros, bajo el criterio de un "precio lógico", una estética llamativa y un nivel tecnológico elevado.
No obstante, desde la compañía han confirmado que el primer lote de Fisker Ocean fabricados será entregados a sus clientes con limitaciones en el asistente de mantenimiento de carril, la ayuda sobre elementos ubicados en puntos ciegos, luces largas automáticas o el asistente de conducción en atascos.
El propio CEO de la marca, Henrik Fisker, ha sido quien ha confirmado tal hecho a través de una entrevista realizada en Automotive News, donde ha confirmado que su prioridad actual es comenzar con las entregas de vehículos, "estén completos o no", para así comenzar a reducir la cifra de pedidos. Al mencionado equipamiento tecnológico que estará ausente en un primer momento, el CEO lo llama "características menos críticas". Sin embargo, gracias a la actualizaciones inalámbricas, estas funciones serán agregadas al modelo una vez estas hayan culminado su desarrollo.
"Francamente, hay muchos clientes a los que no les importa, entonces ¿por qué esperar para lanzar un vehículo?". En caso de aguardar a que estas funciones estén listas, es posible que sus clientes tuviesen que esperar de tres a nueve meses adicionales para recibir su vehículo, lo que detonaría en un retraso en la producción y un correspondiente acumulo de nuevos pedidos que se sumarían a los ya existentes, amén del enfado de sus clientes.
Por su parte, han sido ya muchos los clientes que han confirmado que no quieren tener que esperar varios meses para obtener su modelo con dichas funciones, si más adelante la podrán obtener vía OTA de forma gratuita. El directivo no ha especificado cuáles son los motivos para el retraso en el desarrollo de estas funciones.
Según los propios índices de fabricación que la marca contempla, Henrik Fisker ha asegurado que los niveles de reservas actuales podrían estar completados en los próximos dos años. Los planes hablan de que una vez esto sea así, la compañía podrá entregar sus coches eléctricos de forma casi inmediata. No obstante, el pasado día 17 de noviembre se dio, por fin, luz verde al comienzo de fabricación del SUV eléctrico en la planta de Magna Steyr ubicada en Austria.
Recordemos que el Fisker Ocean llegará a España por un precio de partida de 41.900 euros. Este incorporará elementos como la pantalla giratoria de 17,1 pulgadas o el techo con panel solar. El SUV eléctrico contará con una potencia de acceso de 279 CV y una autonomía homologada de 440 kilómetros. También habrá una variante más capaz con 544 CV y 610 kilómetros de autonomía.