Diseñado en Nissan Design Europe (NDE), el Nissan Concept 20-23 supone todo un revulsivo para la compañía en cuanto a propio posicionamiento. Es una muestra de lo que será el futuro de la marca sobre el diseño de sus coches eléctricos. Bajo esta carrocería tan radical y agresiva se esconde el próximo Nissan Micra, que, como ya sabemos, tendrá mucho de Renault 5.
El Nissan Concept 20-23 ha sido diseñado por y para los clientes más jóvenes. Desde el centro NDE, los encargados de sus líneas, ha sido compuesto por el equipo más joven, ya que la premisa principal fue “diseñar un coche sin limitaciones que les gustara conducir por las calles de la ciudad en la que trabajan”. Y este ha sido el resultado. El nombre, por su parte, hace mención a los 20 años del NDE, así como al número 2 y 3, que, en japonés, se pronuncian “Ni” y “San”, respectivamente.
En materia estética, el Nissan Concept 20-23 está muy influenciado por el sector de las carreras, así como por los antiguos modelos de la marca, como el Be-1 o el Figaro, entre otros. En el frontal se alojan dos grandes luces diurnas LED que toman prácticamente todo el protagonismo de esta zona, con el emblema de la marca sobre el capó y la zona inferior del parachoques compuesta por una gran cantidad de líneas rectas y aristas.
Por otro lado, los pasos de rueda han sido notablemente ensanchados para que destaque aún más la anchura del modelo. Entre ambos ejes se ha acoplado una entrada de aireación a las ruedas, así como, en el pilar C, una abertura que da a la zona trasera del coche. Ya en la zaga cuenta nuevamente con unos faros redondos y el nombre de la marca escrito en el centro.
Sobre elementos del todo radicales se puede destacar el enorme alerón que reposa sobre la luneta, las grandes aberturas sobre el paso de rueda o el generoso difusor que ocupa casi todo el bajo del coche. Todo ello es imprescindible para generar una aerodinámica acorde con las prestaciones del modelo eléctrico, según Nissan. La pintura, por su parte, presenta un acabado texturizado para dar la impresión de estar tallado en una única pieza metálica y de tacto arenoso.
Aunque lo principal de este coche se plasma en su exterior, el equipo de diseño de interiores también ha dibujado un habitáculo igualmente radical. En primer lugar, para acceder a dicho espacio, cuenta con unas puertas de apertura vertical tipo tijera. Dos profundos asientos encastrados en el propio chasis del coche ofrecen una sujeción extraída directamente del mundo de las carreras. Están tapizados en color blanco y su fabricación es a base de materiales ligeros, como la fibra de carbono.
Entre ambos asientos se ubica una consola central que forma “la columna vertebral” en el interior. Sobre el salpicadero, reposa una generosa pantalla que aúna las funciones de información y entretenimiento. Finalmente, el volante cuenta con un diseño rectangular y copado de botones para los diferentes ajustes.
Aunque este parezca, a priori, un modelo muy alejado del mundo real, lo cierto es que es la primera imagen que presenta la marca sobre su futuro utilitario eléctrico, a saber: el Nissan Micra. Este guardará mucha relación con el Renault 5 en cuanto a equipación mecánica, ya que compartirá elementos como la plataforma CMF-BEV o el motor eléctrico. Por ello, se espera que las especificaciones sean prácticamente calcadas: alrededor de 130 CV de potencia para la versión de acceso, así como 400 kilómetros de autonomía. Su precio apuntará igualmente a rondar los 25.000 euros.