El Banco Europeo de Inversiones (BEI) y Galp han firmado tres acuerdos de financiación para la construcción de plantas de energía solar y aumento del despliegue de estaciones de recarga de vehículos eléctricos en España y Portugal por una cifra total que podría acercarse a los 732 millones de euros.
El acuerdo tiene una financiación total de 406,5 millones de euros, que podría incrementarse hasta los 731,5 millones de euros en una fase posterior, con un importe adicional aprobado de 325 millones de euros.
En conjunto, los tres proyectos, que apoyan la acción climática y la cohesión social, generarán una media total de 3,6 teravatios de energía renovable al año, equivalente al consumo energético de casi 940.000 hogares.
Mediante la hoja de ruta del Banco del Clima, el BEI se ha propuesto movilizar 1 billón de euros de inversiones en acción climática y sostenibilidad medioambiental durante esta década.
Para tal fin, el Banco aumentará gradualmente la financiación que destina a estos objetivos hasta alcanzar el 50% para 2025. Por su parte, Galp se ha comprometido plenamente a alcanzar la neutralidad total para 2050, además de una descarbonización parcial para 2030.
"Nos sentimos satisfechos de apoyar a Galp en su camino hacia la descarbonización y de unir fuerzas para promover la acción climática y la generación de energías renovables tanto en España como en Portugal. Estos tres proyectos contribuyen a alcanzar las metas establecidas en el Pacto Verde de la UE, además de potenciar el crecimiento económico, la creación de empleo y la cohesión social", ha apuntado el vicepresidente del BEI, Ricardo Mourinho Félix.
El director general de Galp, Andy Brown, ha señalado que Galp "está acelerando la incorporación de soluciones energéticas con bajas o nulas emisiones de carbono en nuestros negocios". "El apoyo del BEI es clave para ayudarnos a aumentar el ritmo de desarrollo de estos proyectos", ha destacado.
El acuerdo más importante anunciado consiste en un préstamo del BEI para energía verde de hasta 325 millones de euros, destinado a financiar la construcción y desarrollo por parte de Galp de un gran número de plantas solares fotovoltaicas de uso comercial en España. Se prevé que las obras comiencen en los próximos tres años, incluyendo la infraestructura auxiliar para la interconexión a la red.
La cartera de proyectos incluye plantas solares fotovoltaicas de uso comercial con una capacidad total de unos dos gigavatios, equivalente al consumo energético anual de 866.400 hogares. Más adelante también podría acordarse un importe adicional de 325 millones de euros en forma de financiación de proyectos, lo que significa que la financiación global del BEI para este proyecto podría alcanzar a 650 millones de euros. Con unas dimensiones que van desde los 24 megavatios hasta los 449 megavatios, las plantas fotovoltaicas se ubicarán en regiones de cohesión de España (Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha y Extremadura).
La financiación del BEI impulsará la seguridad del suministro energético, la lucha contra el cambio climático, la creación de empleo y la cohesión social, además de contribuir a los objetivos españoles de energías renovables establecidos en los Planes Nacionales Integrados de Energía y Clima (PNIEC).
Mediante el segundo acuerdo, el BEI concederá a Galp un préstamo de energía verde de 40 millones de euros con el fin de construir y explotar cuatro plantas interconectadas de energía fotovoltaica solar con una capacidad total de 144 MWp en el Algarve (sur de Portugal). Una vez operativas, se espera que las cuatro plantas fotovoltaicas generen una media de 230 gigavatios de energía renovable al año, equivalente al consumo energético anual de 72.800 hogares.
Para contribuir al objetivo de la UE de poner en funcionamiento un millón de estaciones de recarga y repostaje en las carreteras europeas para 2025, el BEI le proporcionará a Galp 41,5 millones de euros en apoyo del despliegue de una red de carga de vehículos eléctricos en toda España y Portugal. El proyecto prevé la implantación de 5.500 puntos de carga en el 2025, el 55% de los cuales se situará en las regiones menos desarrolladas y de transición en toda la Península Ibérica.
Por último, Galp ha anunciado que tiene intención de ampliar su oferta de puntos de recarga a 10.000 puntos de recarga de vehículos eléctricos para 2025 en la península ibérica.