España es uno de los países en los que más lento se está produciendo el salto al coche eléctrico. Aunque la cuota de coches eléctricos e híbridos enchufalbes matriculados en nuestro país sea actualmente la única que da signos positivos, lo cierto es que aún queda un largo camino por recorrer hasta que sean mayoría en nuestras calles. Uno de los mayores frentes que han de afrontar fabricantes y Gobierno en España es, sin duda, la concienciación de la población a través de una mejor información, pues aún el 70 % de los españoles declara que no sabe de las ventajas de un coche eléctrico frente a uno alimentado por gasolina o diésel
La entidad que lanza este dato al aire es Ipsos, que se define a sí misma como una empresa líder mundial en lo relativo a investigación de mercados, y dice ofrecer información fiable y una verdadera comprensión de la sociedad, de los mercados y de las personas.
Con uno de sus últimos informes, Ipsos ha apuntado a la despreocupación generalizada en lo relativo al medio ambiente después de las primeras oleadas de COVID-19. En un marco en el que Europa es la región mundial que más se preocupa por el cambio climático y la que más apuesta por política medioambiental, España dentro de ella es el país europeo menos preocupado por el medio ambiente. No obstante, según el informe es donde hay más gente que declara que el medio ambiente se encuentra en una fase crítica, más concretamente un 58 %.
Ford Mustang Mach-E eléctrico.
Existen múltiples formas de aportar nuestro grano de arena en particular a la lucha contra los efectos del cambio climático, y los españoles creen que las que más aportan son las que se llevan a la práctica de forma individualizada. Para la mayoría el reciclaje es la acción más útil, con un 65 % de los encuestados que así lo cree (mientras que el 63 % lo lleva a cabo). Por otro lado un 35 % cree que el uso de energías renovables tiene un gran impacto positivo, pero solo un 12 % hace uso de ellas en su día a día.
Esto último implica directamente a los coches eléctricos o híbridos enchufables, pues tal y como apuntó Volvo previamente, de alimentarse con electricidad proveniente de fuentes renovables su vida útil es mucho más limpia que la de un coche de combustión interna.
No obstante tan sólo el 30 % del público es consciente de los beneficios de un coche eléctrico o híbrido de gran autonomía eléctrica, mientras un 8 % tiene al menos un coche de este tipo. Mirándolo de otra manera, todavía el 70 % de los españoles no sabe de los beneficios de un coche eléctrico, aunque el 56% piensa que su próximo vehículo será un coche eléctrico. Entre los que declaran este último dato no tienen entre sus motivos de compra razones ambientales, sino otros aspectos sociales como la aspiración tecnológica, y económicos como el deseo de reducir el desembolso relativo a mantenimiento a lo largo de su vida útil.
Dacia Spring eléctrico.
Entre las principales excusas que aún suenan en la cabeza de los que declaran que no se lanzarán a comprar un coche eléctrico se encuentran un precio de compra excesivo, autonomía o medios de carga y tiempos de recarga aún no completamente conocidos.