Los coches híbridos son actualmente la opción más recomendable para quienes quieren adquirir un vehículo de emisiones reducidas sin pasar por efectuar el desembolso que requiera un eléctrico puro. Dentro de este contexto, Toyota tiene una de las gamas más avanzadas en cuanto a híbridos convencionales, y uno de sus modelos más exitosos en todo el mundo no cosecha el mismo éxito en España. Se trata del Toyota Camry, una opción casi única en España por la relación que propone entre potencia, tecnología tamaño y precio.
Toyota está viviendo una pequeña época dorada gracias a las ventas de sus coches híbridos. Los Yaris, Yaris Cross, Corolla, RAV4 y demás modelos están constantemente entre las primeras posiciones de la tabla de ventas de cada categoría, pero a decir verdad, el Camry no acaba de explotar en el ámbito comercial en Europa. La razón puede estar, simplemente, en que cuando el público busca un coche que no sea urbano o compacto, busca principalmente un SUV, por lo que se puede decir que el principal problema u obstáculo del Camry es no tener una carrocería de tipo todocamino o crossover.
Es una berlina de grandes dimensiones, pues su longitud se sitúa cerca de los cinco metros: mide 4,86 metros de largo, 1,84 de ancho y tiene una batalla de 2,83 metros. Estas cotas, unidas a su maletero de 525 litros y precio de partida de 43.000 euros, hacen que sea uno de los modelos más asequibles del segmento E, que habitada mayormente por berlinas de corte prémium.
El Lexus ES equipa el mismo motor, pero una concepción más lujosa eleva el precio de partida hasta los 53.000 euros. Los modelos de Mercedes, BMW y Audi sólo disponen de mecánicas híbridas enchufables, por lo que se que encarecen significativamente. Lo mismo sucede con el Skoda Superb, que es en realidad el rival más directo que el Camry puede tener, pero parte de los 51.005 euros según la web de Skoda equipando una esquema híbrido enchufable que, eso sí, le aporta el distintivo de cero emisiones de la DGT.
El Camry, pues, tiene en su etiqueta ECO, sus dimensiones y su motor híbrido sus más fuertes atributos. A todo esto hay que sumar un aspecto de suma importancia en el largo plazo: las configuraciones híbridas de Toyota están demostrando ser las mecánicas más fiables del mundo, por lo que las averías y preocupaciones no serán lo habitual una vez espire la garantía.
Los 218 CV que anuncia su ficha técnica provienen de un motor de gasolina de 4 cilindros de 2,5 litros de cilindrada que por su propia cuenta rinde 174 CV. A este bloque se suma un propulsor eléctrico apostado de manera delantero-transversal que rinde 120 CV y 202 Nm de par motor, lo que aporta garantías de prestaciones suficientes cuando se mueva en modo 100 % eléctrico gracias a una batería de 1,59 kWh.
En la práctica lo anterior significa que podrá alcanzar los 100 kilómetros por hora desde parado en 8,3 segundos, mientras que puede arrojar un consumo de 5,3 litros a los 100 kilómetros según su homologación. Si bien es cierto que los datos de homologación en la mayoría de ocasiones están lejos de las cifras en ámbito real, la verdad es que los esquemas híbridos de Toyota son capaces de llegar a promediar estos consumos sin mayor problema.
En cuanto a su interior, el Toyota Camry goza de un habitáculo del que no podemos esperar grandes satisfacciones en los apartados de la calidad de los materiales, pues aunque se antoja bien resuelto, está concebido para resultar lógico sin grandes alardes en cuanto a lujos.
Existen dos líneas de equipamiento para el Camry en España. La más 'básica' es la Advance, pero de básica no tiene nada, pues sólo echamos en falta ilumación LED para los grupos ópticos principales. De partida equipa elementos como sistema multimedia con pantalla central de 7 pulgadas y compatibilidad con Android Auto y Apple Car Play, asientos de cuero calefactables, cámara de visión trasera, retrovisores calefactables y abatibles eléctricamente, sensores de aparcamiento delanteros y traseros y múltiples sistemas de ayuda a la conducción.
