Hyundai ha presentado el nuevo Nexo, el primer vehículo alimentado por hidrógeno que se matricula en España, equipado con un sistema de propulsión de pila de combustible que permite al modelo alcanzar una velocidad máxima de 179 kilómetros por hora y que ofrece una autonomía de 660 kilómetros, según la nueva normativa WLTP. El Hyundai Nexo está a la venta en España por 68.000 euros.
Su motor de pila de combustible hace que el coche acelere de 0 a 100 kilómetros hora en 9,2 segundos, ofrece una tasa de aprovechamiento del 60% y un consumo de combustible de 0,95 kilogramos cada 100 kilómetros, además de una vida útil de, al menos, diez años o 160.000 kilómetros. Está diseñado para poder ser conducido en condiciones y temperaturas extremas, por lo que el Nexo puede arrancar con una temperatura exterior inferior a los -30 grados Celsius, en apenas 30 segundos.
La batería está situada en la parte trasera del vehículo, que está equipado con tres tanques de hidrógeno y estos pueden albergar un volumen de 52,2 litros de hidrógeno cada una, dispuestos debajo de los asientos traseros. El motor eléctrico se encuentra localizado entre las dos ruedas delanteras, debajo de la pila, de 440 celdas, situada en la parte frontal, lo que permite mantener la arquitectura "convencional" del vehículo.
Al ser un vehículo de pila de combustible no emite partículas nocivas a la atmósfera e incluso filtra y purifica el aire durante la conducción. Cuando el aire circula a través del filtro del Nexo, el 99,9% de las partículas son purificadas y el display del cuadro de instrumentos muestra al usuario cómo el coche contribuye a limpiar el medioambiente.
En la presentación del modelo, el responsable técnico de Hyundai Motor España, Javier Arboleda, ha destacado la rapidez de carga del Nexo, que en cinco minutos alcanza el 100% de su carga, mientras que el Kona, en su versión eléctrica, tras una hora de carga, solo alcanza el 80%. Esto permite que los usuarios "no tengan que cambiar sus hábitos de vida", ya que el sistema y los tiempos de carga del Nexo son prácticamente idénticos a los de uno convencional.
En cuanto al diseño exterior, el Nexo se caracteriza por una silueta "aerodinámica" y un techo flotante; el frontal posee un aspecto "compacto", con luces LED diurnas unidas con una línea de luz continua y una rejilla más ancha que en otros modelos de la marca para aumentar la entrada de aire. Es el primer vehículo de Hyundai equipado con las manillas de las puertas integradas y está disponible en cinco colores diferentes, todos ellos ecológicos (de bajas emisiones): White Cream, Cocoon Silver, Copper Metallic, Titanium Grey y Dusk Blue.
En el interior se han empleado materiales reciclados o de origen natural, es decir, "biomateriales" certificados por UL (Underwriters Laboratories), en todas las superficies, lo que ha ayudado a mejorar un 20% las emisiones de dióxido de carbono (CO2) durante la producción del Nexo. El habitáculo cuenta con un cuadro de mandos compuesto por dos grandes pantallas de LCD, mientras que la consola central tipo "puente" con botones físicos que operan el cambio automático 'shift by wire', activan los modos de conducción y habilitan las configuraciones del climatizador.
El Nexo es el primer modelo de la gama Hyundai que ofrece tecnología de conducción autónoma. El Sistema Autónomo de Aparcamiento a Distancia (Remote Smart Parking Assist - RSPA) permite, por ejemplo, que el vehículo estacione o salga de una plaza de aparcamiento de manera automática, tanto con conductor como sin él.
Todos sus dispositivos de seguridad activa y de asistentes a la conducción están englobados dentro de Hyundai SmartSense. Se trata de nuevos elementos como el asistente de mantenimiento de carril (Lane Following Assist), el avisador de colisión por punto ciego (Blind-Spot Collision Warning) y el avisador de colisión por tráfico cruzado trasero (Rear Cross-Traffic Collision Warning).
Además, la pantalla aporta información específica acerca de la pila de combustible: muestra tanto el nivel de combustible como la estación de servicio más cercana o el flujo de energía, indicando exactamente qué está impulsando el vehículo. También informa del estado del tanque de hidrógeno: la temperatura, la presión y otras informaciones relativas al mismo, además de monitorizar las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y mostrar la cantidad de aire limpio producido por el Nexo.