El Papa Francisco ha recibido este miércoles el primer Papamóvil basado en un coche eléctrico de la historia: un vehículo único fabricado a mano y basado en el nuevo Mercedes-Benz Clase G580 eléctrico.
Mercedes, quien lleva más de 97 años sirviendo automóviles al Vaticano y para el uso del Papa, le ha regalado este automóvil al máximo prelado de la Iglesia católica, que lo ha recibido de manos de Ola Källenius, CEO de Mercedes-Benz.
El primer coche eléctrico como Papamóvil
Curiosamente, este coche eléctrico marca un hito en la movilidad sostenible del Vaticano y se alinea con la visión de la encíclica Laudato Si sobre el cuidado del medio ambiente, explica Mercedes-Benz en un comunicado.
El propio Ola Källenius declaró, durante al acto de entrega -al que siguió una audiencia privada con el Papa en la que le explicaron el desarrollo del vehículo- que, “con el nuevo Papamóvil, el Papa Francisco se ha convertido en el primer Pontífice en utilizar un Mercedes-Benz totalmente eléctrico durante sus apariciones públicas”.
“Este gesto no honra solo a nuestra empresa, sino que también se ha convertido en compromiso con la electromovilidad y la descarbonización” continuaba el CEO de Mercedes-Benz: “agradecemos la confianza de Su Santidad. Este Papamóvil simboliza nuestro esfuerzo continuo por liderar la transición hacia un parque automovilístico neutro en carbono para 2039".
Este Mercedes G 580 ha recibido numerosos detalles para convertirlo en Papamóvil. En un proceso que varios técnicos han llevado a cabo a mano, a este coche se le ha retirado el techo a partir del pilar B, creándose un techo rígido desmontable que permite al Papa ponerse de pie en la parte posterior de este Clase G.
Además, este modelo ha sustituido sus asientos traseros convencionales por una única butaca situada en el centro y regulable en altura. Este asiento principal giratorio permite moverse con flexibilidad y dirigirse al público desde diferentes ángulos. Detrás del asiento individual, se han integrado dos asientos individuales a izquierda y derecha de la carrocería para, llegado el momento, poder transportar pasajeros adicionales.
En la parte posterior, los técnicos de Mercedes-Benz han habitado tanto una escalera plegable como dos plataformas para transportar a los miembros del equipo de seguridad cuando esto sea necesario.
Por supuesto, y al igual que los anteriores Papamóviles, el exterior del vehículo está pintado en el color clásico blanco perla. Y su interior se ha tapizado por completo en cuero blanco, dejando la moqueta del suelo en un color rojo vivo.
Mercedes-Benz y su larga relación con el Vaticano
El primer vehículo de la marca alemana al servicio de un Papa fue un Mercedes-Benz 460 Pullman Saloon que se le entregó al Papa Pío XI en 1930, en el que los técnicos de la marca adaptaron dos asientos principales para personalidades y otros asientos plegables que permitían albergar a más pasajeros.
Pero la marca ha ido entregando numerosos vehículos al Vaticano durante décadas. Así, el Papa Juan XXIII y su sucesor utilizaron sendas limusinas de la marca. Y, en los años 80, Juan Pablo II pasó a utilizar Papamóviles realizados sobre otros modelos de la marca alemana.
El primero fue un Papamóvil basado en un clase G al que siguió, a partir de 2002, otro vehículo papal, basado esta vez en el Clase G 500, y que continuarían usando los sucesores del polaco: los papas Benedicto XVI y Francisco.
Como muestra del compromiso de Mercedes-Benz con la Iglesia católica, la marca explica que alguno de los antiguos Papamóviles se muestran ahora en el Museo de la marca, en la ciudad alemana de Stuttgart.