No es ningún secreto que la llegada del coche eléctrico ha marcado un punto de inflexión en la industria del automóvil mundial. Las marcas tradicionales tienen ante sí un reto muy complicado. Deben apoyar el futuro con la dependencia del pasado y del presente. La movilidad sostenible todavía no es la fuerza mayoritaria. El vehículo eléctrico acapara muchas inversiones y grandes objetivos, más en unas compañías que en otras. Jaguar está en pleno proceso de cambio. Los ingleses lo han apostado todo al coche eléctrico y durante los próximos meses eliminarán cinco de sus seis coches a la venta para quedarse con el único que hoy por hoy es rentable.
Hace ya unos años en Coventry tomaron una decisión que muchos tacharon de locura. Sin la capacidad de poder enfocarse en dos mercados diferentes, Jaguar tomó la firme decisión de apoyar el coche eléctrico con una inversión de 17.400 millones de euros. El mayor gasto en la historia de la compañía. No sólo eso. Durante estos años ha paralizado la actualización de cualquier modelo actual, centrándose exclusivamente en el futuro. La gama presente está obsoleta y apenas consigue vender un puñado de unidades en todo el mundo. Las pérdidas son cuantiosas y con la intención de cortar la hemorragia, sólo uno de los coches actuales sobrevivirá a este año, el Jaguar F-Pace.
Años de trabajo que empezarán a ver sus frutos a partir del 2025
El SUV más grande de la casa es el único que resulta rentable económicamente hablando. El único que suma en lugar de restar. Con miles de millones de euros en facturas, los ingleses no pueden permitirse el lujo de mantener con vida coches que no les dan dinero. Eso quiere decir que en los próximos meses diremos adiós a modelos como el I-Pace, el E-Pace, el XF, el XE y el F-Type. Anteriormente ya se había despedido el XJ, el buque insignia de la casa que será relanzado como un coche totalmente eléctrico a partir del próximo año, aunque no será la primera unidad en llegar al mercado de la mano de la nueva Jaguar.
Toda la inversión está centrada en el desarrollo de los nuevos vehículos eléctricos. La responsabilidad es brutal ya que los trabajos resultantes serán los responsables del relanzamiento de la marca o de su total desaparición. Está en juego una de las marcas más icónicas de Inglaterra y del mundo. La oferta inicial de productos eléctricos estará dominada por tres vehículos distintos con un enfoque común, el lujo. Jaguar quiere dar un paso más allá en su enfoque premium, al igual que lo ha dado Land Rover con algunos modelos de actual éxito como el nuevo Land Rover Defender. El sector de lujo no entiende de crisis, aunque para colarse entre las marcas más queridas por las grandes fortunas se necesita mucho trabajo y mucho dinero.
A pesar de esa apuesta, Jaguar no se olvida de otros segmentos más populares. No puede olvidarse de ellos pues, al fin y al cabo, los ingleses necesitan volumen. Los tiempos eléctricos actuales no son los mismos que hace tres años. El mercado ha cambiado de tendencia. Las ventas eléctricas se reducen y la apuesta de los conductores se centra en otros campos electrificados como híbridos e híbridos enchufables. Recordemos que Jaguar lo ha apostado todo al coche eléctrico. Es por eso que hace unas semanas supimos de un gran acuerdo entre Jaguar y Chery para el uso compartido de una plataforma china para diversos modelos PHEV y BEV de Jaguar y Land Rover.
Los de Coventry tendrán acceso a las arquitecturas E0X y M3X que actualmente Chery emplea en una gran variedad de productos. La plataforma M3X está pensada para vehículos con sistemas eléctricos o híbridos enchufables, la parte que más le interesa aprovechar a Jaguar. Destaca por su gran eficiencia térmica, un 44,5%, y por su promesa de 1.000 kilómetros de autonomía combinada. En cuanto a la plataforma E0X, desarrollada junto con Huawei, esta se centra en vehículos eléctricos o eléctricos de autonomía extendida. Cuenta con un sistema eléctrico de 800 voltios que no sólo reduce los tiempos de recarga, también facilita la introducción de muchos elementos de alta tensión ideales para los vehículos de alta gama como los que Jaguar espera lanzar.