La inestabilidad del mercado obliga a las marcas a pensar en soluciones alternativas con las que poder incrementar las ventas. SEAT está, posiblemente, en el momento más delicado de su existencia tras más de 70 años de historia. La compañía que movilizó a los españoles no tiene el futuro garantizado, ¿o sí? Durante los últimos años se ha especulado mucho sobre una posible desaparición, pero la realidad es bien diferente. Wayne Griffiths, CEO de SEAT y CUPRA analiza en una entrevista a Autocar el futuro de la empresa y la simbiosis entre las marcas. “No nos vamos a desviar de la electrificación como objetivo”.
Ya con esta sencilla frase uno bien puede adelantarse al futuro. SEAT, CUPRA y todas las marcas europeas ya piensan en eléctrico, pero el mercado no evoluciona tan rápido como muchos pensaban o habían calculado. Las matriculaciones de eléctricos, lejos de despegar se han estancado en todo el Viejo Continente. La oferta es cada vez mayor, pero los conductores siguen sin adoptar al coche eléctrico como principal sistema de movilidad. Hoy, más que nunca, es necesario ser flexible. Ofrecer diferentes alternativas electrificadas a los clientes para que sean estos los que opten por la solución que mejor se adapte a sus necesidades y presupuesto.

El León será eléctrico, mientras que el Ibiza y el Arona se actualizarán
Desde que Griffiths llegó al despacho general de SEAT/CUPRA tuvo muy claro qué es lo que tenía que hacer. CUPRA se independizó de SEAT. Dejó de ser su rama deportiva para ser una marca particular y, tal y como se presenta ahora mismo, con más futuro que la propia matriz. Es CUPRA y no SEAT la que está recibiendo los coches eléctricos como el CUPRA Born y el CUPRA Tavascan. Así seguirá siendo de cara a los próximos años, aunque no son tantas las prisas como algunos esperaban. Sin embargo, en el futuro ya está programado el primer León 100% eléctrico, que seguirá el mismo camino que el Golf eléctrico ya confirmado, aunque todavía no se sabe cuándo llegará al mercado.
La flexibilidad hoy lo es todo. La plataforma MQB sobre la que se apoya el SEAT León tiene todavía mucho recorrido por delante, pero mucho nos tememos que en el futuro la designación León sólo estará asociada a CUPRA. Es posible que el León y el Ateca desaparezcan, dentro de unos años, de la parrilla de SEAT. El máximo responsable de la marca reconoce la importancia del León y del Formentor, ambos asentados sobre la misma plataforma del Grupo Volkswagen. "Si queremos avanzar hacia la próxima década, siempre vamos a tener que cuidar esos coches y revitalizarlos. Podríamos esperar renovaciones o mejoras de productos en ambos para que puedan seguir funcionando durante tanto tiempo como sea necesario”.

Si bien la desaparición del SEAT León sería una noticia triste, esta impulsaría un nuevo enfoque para la marca española. Será SEAT la compañía que tenga la responsabilidad de mantener con vida sistemas térmicos electrificados, tanto HEV como MHEV. SEAT podría transformarse en una marca especializada en coches pequeños con etiqueta ECO y sistemas híbridos. Griffiths dijo que las inversiones en Ibiza y Arona no deben verse como un alejamiento del grupo SEAT de los vehículos eléctricos, sino que representan la realidad de una “necesidad de responder al 90% del mercado que pide otros tipos de sistemas de propulsión: eficientes [ICE], híbridos e híbridos enchufables”. El próximo año ambos modelos recibirán nuevas mecánicas ECO.