Kia ha enviado una circular a su red de concesionarios con una medida llamativa y cuanto menos polémica. En la circular se prohíbe a los concesionarios de la red de Kia España vender coches eléctricos e híbridos enchufables hasta el 1 de enero de 2020, una medida que la marca coreana justifica por «un ajuste de producción para este año» pero que en realidad esconde una maniobra cuyo objetivo es acumular para el año que viene matriculaciones de coches de bajas emisiones.
En el texto, cuya imagen adjuntamos más abajo, Kia prohíbe de manera "ineludible sin que quepa excepción alguna" facturar unidades de eléctricos e híbridos enchufables desde el 1 de octubre. Los concesionarios de la marca tampoco podrán matricular coches eléctricos o híbridos enchufables a partir del 1 de noviembre, por lo que tendrán un mes de margen para matricular los coches que se hayan facturado antes del día 30 de septiembre.
Las restricciones se eliminarán el día 1 de enero de 2020, tan pronto como empiece el año próximo, momento en el que vuelve a ponerse el contador de las emisiones de CO2 de toda la flota vendida. Es esta la razón por la que Kia ha adoptado las medidas mencionadas, su "necesidad de alcanzar los objetivos de descarbonización" y evitar así las multimillonarias multas que impondrá la Unión Europea a los fabricantes que excedan el límite impuesto (límite que será diferente para cada marca, pero con un máximo de 95 g/km de CO2 de promedio para toda la flota).
Circular que ha enviado Kia España a su red de concesionarios.
En la carta se explican los objetivos de emisiones impuestos por la Unión Europea para los próximos años y se pone de manifiesto la preocupante situación actual, en la que las cifras de CO2 han aumentado debido a la disminución de ventas de coches diésel (que emiten menos dióxido de carbono que los de gasolina) y la proliferación de los SUV, más grandes, más pesados y más contaminantes.
En cualquier caso, Kia probablemente da por perdido este 2019 y ha decidido centrar esfuerzos para intentar reducir las emisiones de su flota en 2020. Lo hace, eso sí tomando una polémica decisión que afecta directamente a los clientes, que tendrán que esperar al menos hasta el año que viene para comprar un Kia híbrido enchufable o eléctrico. Quieran o no. Y es que está en juego el honor de cara a los jefes en Corea del Sur, que considerarían "un fracaso" inaceptable tener que pagar multas por incumplir los objetivos impuestos.
Los analistas auguran un incumplimiento de objetivos por parte de Kia
Según un estudio de PA Consulting, Kia será uno de los fabricantes que incumplirá el límite que tiene impuesto para 2021. Decíamos antes que el límite varía en función del fabricante, ya que se pondera en función de la masa media de los vehículos que se venden: a mayor masa, mayor es el límite. En el caso de Kia se establece en 91,7 gramos de CO2 por kilómetro y, según PA Consulting, el fabricante coreano se quedará en 94,9 g/km.
Para conseguir el objetivo de emisiones de CO2 y evitar las multas de la Unión Europea, Kia necesita vender 40.000 coches eléctricos de cero emisiones en Europa en 2020. Esto significaría alrededor del 8% de las ventas totales previstas en 2019 y un aumento significativo respecto a los 16.000 coches completamente eléctricos que la marca calcula que venderá este 2019 -de los cuales 12.000 serán unidades del e-Niro y 4.000 del e-Soul-. Por supuesto también tendrán un papel fundamental los híbridos, en mayor o menor grado de electrificación, que deberán ayudar también a reducir las emisiones de la gama.