La crisis sanitaria originada por el COVID-19 parece que va amainando conforme se afronta el último trimestre de 2021, aunque los efectos colaterales de la misma en la rama de la tecnología prometen prolongarse hasta bien entrado el próximo 2022. Así lo ha hecho saber el CEO de Grupo Renault, Luca de Meo, quien ciñéndose al sector del automóvil ha señalado que la situación puede perdurar mucho más de lo esperado.
A través de unas entrevista publicada por el diario español Expansión, el director ejecitivo del Grupo Renault, de origen italiano, ha advertido que como consecuencia de la actual situación de desabastecimiento de semiconductores el precio medio de los coches seguirá aumentando en los próximos compases.
Citó De Meo textualmente en la entrevista: "Los precios subirán aún más en los próximos 12 meses". Lo comentado por De Meo no implica, sin embargo, que el precio de cada modelo ofertado se vea incrementado. Por contra, lo que provoca la escasez de semiconductores que es que los fabricantes tengan que elegir qué modelos se fabrican y cuáles no. En esta tesitura, pues, se decantan por aquellas versiones que mayor margen de beneficio dejan tras su venta. Es decir, se eliminan aquellas que representan el escalón de acceso a cada modelo dado su precio más bajo y que por tanto menos beneficios aportan a sus responsables.
Renault 5 eléctrico conceptual y Renault Mégane E-Tech Electric.
Ejemplificando la situación con un caso ajeno a las firmas de Luca de Meo y el Grupo Renault, podemos tomar a los dos coches eléctricos del Grupo Volkswagen que más protagonismo comercial están llamados a tomar, los Volkswagen ID.3 y CUPRA Born, dos modelos producidos en la misma factoría alemana de Zwickau.
Recientemente el consorcio alemán anunciaba que limitaba la oferta de versiones del Volkswagen ID.3, eliminando su versión de acceso, así como la del Volkswagen Golf. En el caso de CUPRA, semanas atrás la firma española daba el inicio a la andadura comercial de su primer coche eléctrico, pero al igual que el ID.3 lo hacía sin las versiones más accesibles del mismo.
Las matriculaciones caen, pero los fabricantes ganan más
Como consecuencia de todo lo anterior el total de matriculaciones ha sufrido una caída generalizada en todos los países del marco europeo, pero en base a los resultados económicos trimestrales presentados por cada fabricante en estas últimas semanas, lo cierto es que se aprecia una subida en los márgenes de beneficio.
Y es que aunque cada uno de ellos está logrando un menor número de ventas, un margen de beneficios más pronunciado por cada unidad comercializada les está valiendo a algunos, incluso, a alcanzar ganancias récord. En este sentido, BMW, por ejemplo, prevé que sus ganancias se vean incrementadas con respecto a los números de estos últimos meses durante los primeros compases del año.
Luca de Meo también ha comentado que existen más factores que están provocando que el precio medio de cada coche vendido cada vez sea más alto, pues trabajar con materias primas como el acero, el gas, el cobre y el aluminio está siendo cada vez más caro a causa de las acusadas subidas del precio de la electricidad.
