La demanda de materias primas como litio o cobalto, fundamentales para las celdas de las baterías, aumentará drásticamente en los próximos años en consonancia con el crecimiento del mercado de vehículos eléctricos. Los fabricantes necesitan garantizarse el suministro de las mismas, y en el caso del cobalto preocupa especialmente su procedencia y las condiciones de su extracción: el principal productor mundial, la República Democrática del Congo, es conocido por vulnerar derechos humanos en las minas, donde es frecuente la esclavitud y el trabajo infantil. De ahí que los fabricantes de coches estén buscando alternativas más éticas, y Marruecos se postula como una de ellas.
El Grupo BMW tiene previsto tener 25 modelos electrificados para el año 2023, de los cuales 13 serán coches completamente eléctricos. Para ello necesitarán más baterías y, por ende, mayor cantidad de materias primas para sus celdas. El grupo alemán estima que dentro de cinco años necesitarán tres veces más cobalto que en la actualidad. Y ante las preocupaciones de su procedencia, ya trabajan para buscar alternativas al Congo que garanticen un origen ético.
BMW ha firmado un acuerdo con la compañía minera marroquí Managem Group para los próximos cinco años (2020-2025), por un valor de 100 millones de euros, para asegurarse cobalto de origen 'sostenible'. Con este contrato, Marruecos suministrará una quinta parte del cobalto que BMW necesita para su nueva generación de coches eléctricos. El 80 por ciento restante del cobalto de origen ético procederá de Australia. A fecha de junio de 2019, los países de origen del cobalto de BMW eran Australia, República Democrática del Congo, Finlandia, Madagascar y Rusia.
A partir de 2021, BMW dejará de comprar cobalto en el Congo y dejará también de usar tierras raras en sus motores eléctricos. Para la quinta generación de celdas de batería, BMW ha reestructurado sus cadenas de suministro y se encargará de suministrar el litio y el cobalto directamente a sus dos proveedores de celdas: CATL y Samsung SDI. De esta manera BMW se asegura el cumplimiento de criterios éticos y de sostenibilidad medioambiental sobre el origen de las materias primas.
Para asegurarse el abastecimiento de baterías a largo plazo, BMW tiene acuerdos con CATL por valor de 7300 millones de euros (periodo 2020-2031) y con Samsung SDI por 2900 millones de euros (2021-2031). Actualmente BMW fabrica baterías internamente en sus plantas en Dingolfing (Alemania), Spartanburg (EE.UU.) y en la planta de BBA en Shenyang (China).