El Gobierno ha estado promoviendo activamente la adquisición de vehículos eléctricos e híbridos enchufables durante años, como parte de un esfuerzo sostenido para alcanzar la descarbonización y cumplir con las metas de reducción de emisiones establecidas en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), que es fundamental para la Agenda 2030.
En este contexto, el Plan MOVES III ofrece una ayuda (para aquellos modelos que cuesten menos de 45.000€ antes de impuestos) de hasta 7.000 € para los 100% eléctricos y 5.000 € para los híbridos enchufables, siempre y cuando se achatarre uno antiguo (4.500 y 2.500 euros respectivamente si no se achatarra). Además, se ha introducido una deducción fiscal del 15% en la Declaración de la Renta, con un tope de 20.000 € (por lo tanto un máximo de 3.000 € en función de la renta). La suma total dice que, pasado el tiempo y tras todas las gestiones, la ayuda puede ser de hasta 10.000 €, de los que hay que descontar la parte que hay que declarar en la renta (alrededor de un 20%).
Pero la ayuda no se queda ahí: depende de la comunidad autónoma
Mientras en Alemania, la conclusión de las subvenciones está generando una notable reducción en los precios, en España, tanto el Gobierno central como las autoridades regionales continúan promoviendo incentivos para fomentar la adquisición de vehículos eléctricos y la instalación de infraestructura de carga.
El alto precio de los coches eléctricos es uno de los factores que frena la transición a esta tecnología. Actualmente, los vehículos eléctricos con un precio inferior a 25.000 € constituyen solo el 4% del total del mercado. Estas ayudas no son entregadas de manera instantánea, una demanda clave del sector, ya que el tiempo de espera para recibirlas puede superar el año.
No obstante, las condiciones no son iguales para todos los compradores. En algunas regiones, los beneficios fiscales pueden ser aún mayores, ya que permiten deducciones adicionales en la declaración del IRPF autonómico por la compra de vehículos de bajas emisiones. Las comunidades autónomas de Castilla y León, Asturias, La Rioja y Navarra proporcionan incentivos significativos que disminuyen el precio de adquisición de los vehículos eléctricos e híbridos enchufables.
Castilla y León
En Castilla y León, el IRPF está cedido, lo que significa que, además de las deducciones estipuladas por la legislación estatal (ley 35/2006), los contribuyentes también pueden beneficiarse de las deducciones establecidas por su Comunidad Autónoma.
Ofrece a los contribuyentes la posibilidad de deducir el 15% del coste de adquirir vehículos eléctricos puros, de autonomía extendida o híbridos enchufables con más de 40 kilómetros de autonomía eléctrica. La deducción máxima es de 4.000 € por vehículo, aplicable tanto en la declaración de impuestos individual como conjunta. El precio del vehículo no debe superar los 40.000 €, no se puede usar para fines comerciales y ha de permanecer en propiedad del contribuyente por, al menos, cuatro años tras su adquisición.
Esta deducción es exclusiva para el individuo a nombre del cual se expide la factura de compra y sólo es válida en el año fiscal en el que el vehículo es registrado. En Castilla y León, acumulando todas las subvenciones posibles, un contribuyente puede llegar a recibir hasta 14.000 € por la compra de un vehículo eléctrico o híbrido.
Asturias
Al igual que Castilla y León, el Principado de Asturias tiene cedido el IRPF. En este caso, la deducción autonómica para la compra de un vehículo eléctrico, se aplicará únicamente para los años fiscales 2022 y 2023, tal como indica la Agencia Tributaria. El importe de la deducción será del 15% del total pagado durante el año fiscal por la compra del vehículo, con un límite de deducción de 50.000 € por automóvil. Esto significa que la deducción en la parte autonómica puede llegar hasta 7.500 €.
Se permitirá a cada contribuyente aplicar la deducción para la compra de un único vehículo, que deberá ser enchufable o de pila de combustible y no estar destinado a actividades económicas. El contribuyente ha de tener en su poder el contrato de compraventa correspondiente y la deducción se aplicará exclusivamente a la persona que conste en dicho contrato.
Al añadir a esta suma el límite máximo de la deducción estatal y la ayuda del Plan MOVES, el descuento total en el precio del vehículo podría alcanzar los 17.500 €. Es importante recordar que todas las ayudas recibidas deben ser declaradas.
La Rioja
En La Rioja, los contribuyentes pueden beneficiarse de una deducción del 15% en la compra de un coche eléctrico, con un coste máximo del vehículo de 50.000 €. Esto establece un tope de deducción de 7.500 €, que, sumado a los 3.000 € de ayuda estatal y los 7.000 € del Plan MOVES, puede resultar en un ahorro total de hasta 17.500 €.
Como en otros casos, estos vehículos no deben ser destinados a uso profesional o empresarial. Además, La Rioja ofrece un incentivo para la adquisición de bicicletas eléctricas, proporcionando 300 € para bicicletas eléctricas completas y 225 € para bicicletas con asistencia de pedaleo eléctrico.
En estos tres casos, se trata de cantidades muy importantes que superan con creces las que se pueden obtener en Madrid, Cataluña o Valencia, donde la suma no superaría los 10.000 €.
Navarra, un caso diferente
Navarra, junto con el País Vasco, posee un sistema foral propio, diferente al del resto de España, lo que significa que las deducciones fiscales por la compra de vehículos se rigen por las normativas específicas de estos territorios forales.
Por eso, esta comunidad autónoma es la que más ayudas ofrece en forma de deducciones fiscales para la compra de vehículos eléctricos. Pueden acceder a ella tanto individuos y trabajadores por cuenta propia a través del IRPF como empresas a través del Impuesto de Sociedades. Aunque, al tener un régimen fiscal propio, no permite la deducción estatal, ofrece los incentivos más altos para la compra de vehículos eléctricos: un 30% para eléctricos puros y un 5% para híbridos, con un aumento hasta el 35% y 10%, respectivamente, si el contribuyente gana menos de 30.000 € o la unidad familiar menos de 60.000 €.
El límite máximo deducible es de 32.000 €, lo que significa que un contribuyente que gane más de 30.000 euros y reciba la ayuda máxima del Plan MOVES, puede obtener hasta 16.600 € en total. Si gana menos de 30.000 euros, la ayuda puede aumentar hasta 18.200 €, la más alta de España para la compra de un eléctrico puro.
Navarra también promueve la instalación de infraestructura de recarga, ofreciendo deducciones que varían según la potencia del cargador: 15% para menos de 7,4 kW, 17% para entre 7,4 kW y 22 kW, y 20% para entre 22 kW y 50 kW. Para los vehículos eléctricos, se requiere la factura, el justificante de pago y la ficha técnica para la deducción, mientras que para la instalación del cargador se necesita un informe del STE.