Ese es uno de los propósitos del ambicioso plan de la firma para transformar todas sus líneas de vehículos deportivos y superdeportivos en híbridos de cara al año 2025. Según Mike Flewitt, consejero delegado de McLaren, pretenden adaptarse a los futuros estándares de emisiones que afectarán a la industria automotriz en todo el planeta. Estándares que supondrán importantes restricciones en emisión de gases de efecto invernadero por parte del poder legislativo. Por eso los fabricantes deben estar preparados y tomar decisiones en esa dirección, en opinión de Flewitt. La producción de vehículos híbridos y, de manera ocasional, de algún coche eléctrico será básica en ese sentido.
En cuestión de baterías, las tecnologías actuales no proporcionarán el rendimiento que precisa McLaren hasta el año 2025. La firma no está dispuesta a ofrecer soluciones de tren motriz comprometedoras, a menos que cada McLaren que salga de fábrica sea utilizable. Para Flewitt, la cuestión va más allá de reducir las emisiones de CO2: es necesario ofrecer un coche deportivo mejor. El directivo de McLaren asegura que han establecido media hora de uso completo sobre pista. Los nuevos vehículos eléctricos de la marca deben cubrir ese periodo sin necesidad de recargar. Además, la recarga inicial antes del circuito, se debe realizar, como mucho, en 30 minutos.
El SUV, demasiado costoso para McLaren
Recientemente, marcas como Lamborghini han empezado a operar en los mercados crossover y SUV, algo que no se plantean en McLaren. Su consejero delegado argumenta que un SUV es demasiado costoso: supondría un esfuerzo en ingeniería compartida para desarrollar un modelo comercial que respalde el portafolio de la firma. Flewitt también cree que un auto SUV reduciría la pureza de McLaren como fabricante de superdeportivos. Tampoco cuentan con la tecnología necesaria ni los recursos suficientes a invertir en un proyecto de este calibre. Básicamente, un SUV no les proporcionaría la rentabilidad económica que esperan.
¿Posible succesor del P1?
Hace cinco años, McLaren presentó su híbrido (gasolina-electricidad) conocido como P1. Ahora, desde la marca explican cómo será el sucesor del P1, bólido de 900 caballos, liviano y de conducción atractiva. En síntesis, será un nuevo coche que aunará varios factores: dinámica de conducción, software de control y tecnología de tren motriz. Flewitt describe un vehículo ligero, súper aerodinámico y de alto rendimiento. Que haga cosas que solo se podían hacer en los circuitos de carreras años atrás. Y por supuesto, que se comporte como un automóvil ideal para conducir en carretera.
Los nuevos planes de McLaren prevén un incremento notable de la producción. Se pasaría de los 3.300 coches anuales del pasado ejercicio a los 6.000 dentro de siete años. Ello se debería a la apertura y buena acogida en nuevos mercados asiáticos (China, Taiwán, Tailandia, Corea, etc.). Además, el equipo de la marca estudia el tamaño de los mercados ruso e indio. Eso sí, sin perder ni un ápice de la exclusividad que caracteriza a los McLaren.