Las baterías son sistemas simples en cuanto a su composición, con cuatro componentes principales, pero complejas en cuanto a su funcionamiento, ya que no dejan de depender de reacciones químicas sujetas a diferentes circunstancias. Una batería se compone de un electrodo positivo (cátodo), un electrodo negativo (ánodo), un electrolito por el que se mueven los iones para viajar de un electrodo a otro y un separador que evita que se toquen. Este último elemento es fundamental para garantizar la seguridad de las baterías y es sobre el que trabajaran General Motors y el fabricante de baterías Microvast gracias a esta nueva asociación.
Los separadores se encargan de evitar que el ánodo y el cátodo se toquen y con ello permiten la transferencia de los iones entre ellos. Por eso, y aunque habitualmente no se le da la importancia que merece, es uno de los elementos más importantes dentro de las celdas de batería. Las dos empresas trabajarán juntas para desarrollar una nueva tecnología para la fabricación de estos separadores que ayude a mejorar la seguridad, la carga y la duración de la batería de los vehículos eléctricos. Esta tecnología avanzada se diseñará para que contribuya a mejorar la estabilidad térmica de las baterías y funcionará con casi todos las químicas de las baterías de iones de litio.
El resultado de esta colaboración será una tecnología de separación pionera que podrá ser implementada en las futuras baterías Ultium respaldando los compromisos de seguridad que debe cumplir este componente esencial para los vehículos eléctricos, así como la construcción de una nueva planta de separadores en los Estados Unidos. Por ahora, ninguna de las empresas ha indicado un cronograma de trabajo ni ha dado pistas sobre la ubicación de dicha planta.
Ley de Reducción de la Inflación de Estados Unidos
La semana pasada, la directora ejecutiva de GM, Mary Barra, aseguraba que todos los modelos eléctricos de la compañía calificarían para el crédito fiscal completo de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) de Estados Unidos en dos o tres años: "Inicialmente seremos elegibles para los 3.750 dólares y alcanzaremos la calificación completa que permite llegar a los 7.000 dólares en los próximos dos o tres años".
Para lograr este objetivo, los coches eléctricos deben cumplir dos requisitos fundamentales:
- Minerales críticos (3.750 dólares): a partir del próximo año, al menos el 40 % del valor de los minerales críticos utilizados en la batería del vehículo eléctrico deberá fabricarse o ensamblarse en los Estados Unidos, con sus socios de libre comercio, o reciclarse en América del Norte. A partir del siguiente año, el requisito aumenta en un 10%. Por ejemplo, en 2024 se necesitará el 50%, en 2025 el 60%, en 2026 el 70% y así sucesivamente.
- Componentes de la batería (3.750 dólares). A partir del próximo año, al menos la mitad del valor de los componentes de la batería de los vehículos eléctricos deberá fabricarse o ensamblarse en América del Norte. Asimismo, el requerimiento se incrementará en un 10% cada año.