A cada paso que da NIO, la marca desvela una nueva tecnología o un nuevo modelo que promete batir a las marcas tradicionales. En el campo de la recarga, los chinos están obsesionados con reducir los tiempos de espera. La tercera generación de sus estaciones de intercambio de baterías prometen operaciones en menos de cinco minutos, aunque su cada vez más extensa red de carga pronto se completará con los nuevos cargadores ultrarrápidos de 500 kW. Presentados durante el NIO Day 2022 del pasado 24 de diciembre, las cifras demuestran que cada vez será necesario detenerse durante menos tiempo.
En el pasado mes de agosto, XPeng presentó sus cargadores S4 con hasta 480 kW que permiten recuperar 200 kilómetros de autonomía en apenas cinco minutos. Pocos puntos de carga en el mundo son capaces de igualar las prestaciones de las estaciones S4, pero en esa batalla NIO ha superado a sus más inmediatos rivales. Con apenas 50 kW adicionales de potencia, los puntos NIO permitirán la conexión con cualquier eléctrico, aunque será especialmente provechoso para los modelos más avanzados.
Con una corriente máxima de 650 amperios, los Power Charge 3.0 ofrecerán tiempos de carga reducidos. NIO ha anunciado que los coches eléctricos con sistemas de 800 voltios podrán pasar del 10 al 80% de la carga de la batería en apenas 12 minutos, mientras que los vehículos con sistemas de 400 voltios ampliarán el tiempo hasta los 20 minutos. Una reducción considerable si tenemos en cuenta que la espera actual suele rondar los 30 minutos en las estaciones más potentes de la red. Sirva como comparación los cargadores V3 de Tesla con una potencia de carga de 250 kW y 630 amperios de corriente.
NIO ha trabajado mucho en mejorar cada detalle de sus estaciones de carga de tercera generación, pero sobre todo se ha centrado en la refrigeración del mazo de cables. Con una tecnología de enfriamiento propia y altamente efectiva, los ingenieros han conseguido reducir significativamente el peso de la manguera para que los usuarios puedan manejarla más fácilmente con una sola mano, operación que no siempre es posible. Gracias a un software de comunicación de última generación, la conexión entre el punto de carga y el vehículo será más rápida y toda la operación se podrá vigilar a través de un gran panel LCD de 15,6 pulgadas de tamaño.
El despliegue de la nueva red de carga de NIO comenzará a partir del próximo mes de marzo en China. Por el momento, la marca no ha aclarado si los Power Charge 3.0 llegarán a Europa como sí lo harán las nuevas estaciones de intercambio de batería.
El año 2023 se presenta especialmente activo para la marca asiática. Además de sus nuevas instalaciones de recarga, la oferta de productos se ampliará con el lanzamiento de nuevas unidades y actualizaciones de modelos ya conocidos. Los últimos modelos en ver la luz han sido el renovado NIO ES8 y el nuevo NIO EC7. Ambos desembarcarán en Europa a partir del próximo año, seguramente después del verano.