El 1 de septiembre de 2018 se desplegará, ya de forma definitiva y obligatoria, el nuevo ciclo de homologación WLTP en sustitución del ya obsoleto NEDC. Aunque ambos estándares comparten el objetivo de comparar el comportamiento de diferentes vehículos en condiciones de conducción similares, el WLTP ha sido diseñado para representar de forma más fidedigna las condiciones reales de la carretera, con una duración más larga y muchas más fases de aceleración y frenado. Pero, ¿qué cambios habrá y cómo afectará la llegada del nuevo protocolo de homologación a los distintos tipos de propulsores?
El antiguo ciclo NEDC, con paradas más frecuentes y más de un tercio del tiempo circulando a velocidad constante, provocaba que los resultados se alejasen, cada vez más, de la realidad. Según un estudio realizado por PA Consulting, en 2002 las emisiones reales diferían un 10% de las registradas en las pruebas NEDC. En cambio, con la evolución de los motores hacia unidades de menor cilindrada y la inclusión de sistemas start-stop que eliminaban las emisiones por completo en las detenciones, la holgura entre la teoría y la realidad se fue dilatando hasta alcanzar el 35% en el año 2016.
La diferencia entre los resultados del ciclo NEDC y las emisiones reales se han llegado a triplicar. (Fuente: PA Consulting)
Como resultado de esto, este año 2018 llega el nuevo ciclo de homologación WLTP, con el que los motores de mayor cilindrada y aquellos que estén equipados con tecnología híbrida arrojarán mejores cifras de rendimiento y emisiones que aquellos de la generación de propulsores anterior, que confiaron su eficiencia al downsizing (motores de bajo desplazamiento con tres o cuatro cilindros) y a un sistema de detención automática del motor (start&stop) que solamente es últil en las paradas. Por contra, saldrán perjudicados los vehículos equipados con catalizador calentado eléctricamente, los motores turbo y aquellos que incluyan equipamiento extra con influencia en el consumo, como el climatizador.
Los motores híbridos y las transmisiones manuales, entre los beneficiados por el ciclo WLTP. (Fuente: PA Consulting)
Según PA Consulting, los mayores beneficiados de la llegada del WLTP serán los motores híbridos eléctricos ("full hybrid") y los híbridos suaves ("mild hybrid") que habiliten el llamado "modo vela". Debido a las condiciones en las que se realizan las nuevas pruebas de consumo y emisiones, los vehículos circularán durante más tiempo a "modo vela" o lo que es lo mismo, dejándose ir, sin apretar el acelerador. Como consecuencia, según el mencionado informe, los vehículos equipados con sistemas propulsores híbridos completos o híbridos ligeros de 48 voltios registrarán un mejor rendimiento energético y menores emisiones. Esto es debido a que este tipo de sistemas entran en acción de forma mucho más frecuente en las pruebas WLTP que en las NEDC, beneficiándose de las largas etapas de deceleración para recuperar energía y cargar sus baterías.