Volkswagen busca incrementar su gama de modelos eléctricos. Esta decisión ha llevado a que los responsables de la marca den luz verde a expandir la familia de vehículos que ya estaban planificados bajo la nomenclatura ID. Según ha podido confirmar el propio CEO, Thomas Schäfer, al medio Autocar, esto lo llevarán a cabo creando variantes de carrocería de los modelos ya conocidos, comenzando por el Volkswagen ID.3.
Era cuestión de tiempo que Volkswagen quisiera aumentar su oferta de modelos eléctricos tipo SUV más allá del ID.4, ID.5, ya conocidos o el D.6, que llegará próximamente. Estos modelos atacan a un nicho concreto, ya que son, en algunos casos, notablemente más grandes que el ID.3 a pesar de que comparten la misma plataforma, por lo que dejan atrás un generoso hueco en el mercado, un espacio que han decidido que debe ser cubierto.
El primero que dividirá su gama actual será el Volkswagen ID.3, puesto que el propio CEO así lo ha confirmado. Su variante SUV, que podría recibir el nombre de Volkswagen ID.3 X, será "dramáticamente diferente a la estética del modelo actual". Su llegada al mercado está prevista para el año 2026.
Este se presentará como el SUV eléctrico de acceso a la gama más "sostenible" de Volkswagen, pero eso no será todo. El año 2026 se presenta del todo interesante para la compañía alemana, puesto que supondrá la actualización del Volkswagen ID.3 y el lanzamiento de dos alternativas derivadas del compacto; a saber, el mencionado SUV eléctrico y una variante deportiva del mismo. Estos entrarán en el mercado de forma muy similar a lo que actualmente lo hace el Volkswagen Polo y el Volkswagen T-Cross, por ejemplo.
Para dicho año, Volkswagen espera lanzar un total de 10 nuevos eléctricos, completando así una de las gamas eléctricas más polifacéticas del mercado. "Desde el coche eléctrico más básico, con un precio objetivo de menos de 25.000 euros, hasta el Volkswagen ID.Buzz y el nuevo Volkswagen ID Aero, tendremos la oferta adecuada para cada segmento", afirmó el CEO en su intervención.
Esta generosa familia de modelos eléctricos continuará asentándose sobre la conocida plataforma MEB, que no tiene prevista su retirada hasta finales de esta década en favor de la nueva arquitectura SSP. En cualquier caso, el CEO ha confirmado que la plataforma de uso actual continua logrando "avances significativos en términos de autonomía, rendimiento y características útiles".
Actualmente, la compañía alemana, se encuentra en un intenso proceso de evolución, en el que su objetivo es "despojarse de viejos hábitos", en términos de producción, y enfocarse en modelos básicos de futuro y "simplificando notablemente nuestra gama de modelos y paquetes para los próximos diez años", afirmó el máximo responsable. Esto supondrá la eliminación de algunos de sus actuales modelos de combustión, para así reducir su cartera de productos, pero también de opciones. "Queremos estar a la altura de nuestro lema de volumen: hacer menos, pero hacerlo bien".