La OCU muestra con un ejemplo palpable el error que se comete hoy en día con las etiquetas medioambientales

La organización solicita la ayuda de los usuarios para exigir un cambio en la etiquetas de la DGT e impulsar medidas que favorezcan la movilidad.

Las etiquetas ECO, la más controvertida.
Las etiquetas ECO, la más controvertida.
27/06/2024 09:30
Actualizado a 27/06/2024 09:30

Las razones para comprar un coche son diversas, incluyendo el diseño, la calidad, el equipamiento y el espacio. Sin embargo, desde 219 hay otro argumento que también influye a la hora de tomar esta importante decisión. La etiqueta medioambiental se ha convertido en una de las principales consideraciones ya que se han vuelto un tema clave en el sector automotriz

Con cuatro pegatinas diferentes, B, C, ECO y CERO, un estudio de la OCU de 2023 ya revelaba que estos distintivos a menudo se aplican incorrectamente y necesitan una revisión normativa. En su día, permitió concienciar a los usuarios sobre las tecnologías que contaminan en mayor o menor medida. Sin embargo, este sistema de etiquetado también condiciona las posibilidades de acceso a las ciudades debido a las restricciones implementadas en las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), lo que, en consecuencia, limita la movilidad de los usuarios.

etiquetas dgt ocu coches electricos 2
La etiqueta 0 Emisiones se aplica tanto a coches 100% eléctricos como a híbridos enchufables, circulen o no en modo eléctrico.

La OCU exige un cambio cuanto antes

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) lleva tiempo exigiendo que este etiquetado se base en la contaminación real de los vehículos y no en el tipo de motor. Esta demanda surge porque se producen situaciones incoherentes.

La normativa es bastante flexible al certificar un coche con uno de estos distintivos. La mayor discrepancia se observa en la etiqueta ECO. Los híbridos convencionales, que pueden desplazarse distancias limitadas en modo eléctrico, tienen una ventaja en términos de emisiones y consumo, aunque requieren muchos kilómetros para que su compra sea justificable.

Por otro lado, esta etiqueta también se otorga a modelos micro híbridos (MHEV), cuyo motor eléctrico no puede mover las ruedas y, por lo tanto, siempre consumen combustible. En otras palabras, estos modelos tienen muy poco de coche eléctrico. La OCU muestra un ejemplo claro de la injusticia que se comete entre unos modelos y otros.

Mercedes AMG S 63 E Performance Edition 1 03
Mercedes-AMG GT 63 S E Performance, un Clase S con 802 caballos es lo más radical del mercado.

Estos tres coches de alto consumo reciben etiquetas ECO y 0 Emisiones, solo por incorporar bajo el capó unas ayudas eléctricas que no siempre reducen la contaminación.

  • Mercedes GLS 600 4 Matic. Mild hybrid. Consumo 13,9 l/100: Etiqueta ECO
  • BMW X5 M Competición. Mild hybrid. Consumo 12,9 l/100:. Etiqueta ECO
  • Mercedes AMG S 63 E. Híbrido enchufable. Consumo homologado: 4,4 l/100. Consumo cuando funciona con gasolina: más de 12 l/100. Etiqueta 0 emisiones.

Sin embargo, un Toyota Aygo X Cross de gasolina, que no tiene ningún apoyo eléctrico pero tiene un consumo homologado muy bajo, de 4,8 l/100, recibe una etiqueta C, que lo califica como más contaminante.

 Toyota renovará el Aygo, y muy probablemente se convertirá en un coche eléctrico
Toyota Aygo.

Al utilizarse estas etiquetas para restringir el tráfico en las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), se llega a la paradoja de que una persona que adquiere un utilitario barato de gasolina con poco consumo y bajas emisiones no puede acceder a ellas. Mientras, otra con un híbrido enchufable de consumo elevado y gran potencia y, probablemente mucho más caro, puede hacerlo sin problemas e incluso aparcar gratis en zonas de estacionamiento regulado en ciertas ciudades.

Por ello, la OCU exige, en primer lugar, revisar el sistema de etiquetas para que se base en las emisiones reales y no en la tecnología del motor. Estas son sus exigencias y, para lograrlas, ha puesto en marcha una campaña a la que se puede acceder desde este enlace y unirse a estas peticiones:

  • Promover el renting barato de coches eléctricos urbanos para personas con pocos recursos que no tienen posibilidad de adquirir un coche nuevo y lo necesitan.
  • Ampliar las ayudas a la adquisición de vehículos nuevos con bajas emisiones; teniendo también en cuenta a los ciudadanos más vulnerables.
  • Extender las ayudas del Plan Moves a coches de segunda mano con etiqueta Cero Emisiones de más de 12 meses). El incremento de los precios de los coches impide la sustitución de uno sin etiqueta por otro nuevo a muchos usuarios que lo necesitan para entrar en la ciudad por motivos laborales o familiares. Estas ayudas deberían ser directas, de modo que no haya que esperar meses hasta poder recibirlas, como ocurre ahora.
  • Ampliar las redes de puntos de recarga de automóviles eléctricos, para fomentar el uso de estos vehículos e instaurar un sistema de pago único, así como cargadores lentos en las zonas urbanas para que las personas que no dispongan de parking puedan pagar.
  • Promover el transporte público de manera decidida, con una amplia red de carriles bici protegidos y conectados, la peatonalización de las zonas históricas y comerciales, además de la intermodalidad entre los diferentes medios de transporte.
  • Señalizar de manera amplia, clara y bien visible de la entrada a la ZBE, tanto sobre la calzada, como en los laterales, incluyendo dispositivos luminosos para evitar sanciones por el desconocimiento de las zonas delimitadas.
  • Construir parkings disuasorios en los límites de las ZBE, gratuitos y bien conectados con el centro mediante transporte público. Es vital facilitar a los residentes del extrarradio y de poblaciones limítrofes con coches sin etiqueta ambiental de la DGT el acceso rápido y sencillo a la ciudad.
  • Derecho a entrar en la ZBE con un coche sin etiqueta un determinado número de veces al año. Lo que facilitaría la entrada conductores en caso de urgencia (por ejemplo, para acudir al hospital), además de a los turistas que esporádicamente visiten la ciudad.
  • Informar de manera clara de las restricciones en cada ciudad. Es necesario que los municipios que todavía no han diseñado sus ZBE a que lo hagan cuanto antes para que los habitantes puedan hacer sus previsiones.
  • Implementar mejoras de las condiciones ambientales en determinadas zonas de las ciudades, teniendo en cuenta todos los aspectos no solo aquellas medidas recaudatorias.
  • Crear una página web actualizada que informe de todas las zonas de bajas emisiones, para que las personas que no vivan en las localidades afectadas puedan conocer las restricciones fácilmente.
Sobre la firma
foto gonzalo garcia
Gonzalo García

Redactor y probador especializado en vehículos eléctricos y movilidad sostenible. Escribe en Híbridos y Eléctricos desde 2017. Es ingeniero de Caminos por la Universidad Politécnica de Madrid y Técnico especialista en vehículos híbridos y eléctricos por la SEAS. Ha trabajado en medios como Movilidad Eléctrica y Km77.